España es sinónimo de cultura, arquitectura y gastronomía. Ciudades como Madrid o Barcelona son reconocidas como algunas de las más interesantes del mundo, atrayendo a turistas de todo el planeta.
Sin embargo, el país esconde joyas que han quedado olvidadas en el tiempo. Desde antiguos asentamientos hasta majestuosas construcciones que se desvanecieron en la memoria colectiva, estos lugares abandonados son testigos de la historia española y esperan ser descubiertos nuevamente.
Belchite (Zaragoza)
Las huellas de la Guerra Civil son evidentes en el antiguo Belchite. Sus edificaciones en ruinas y calles desiertas son un testimonio del conflicto bélico que llevó su nombre. Además de su valor histórico, Belchite ha adquirido notoriedad por los fenómenos inexplicables que muchos visitantes afirman haber experimentado.
Explorar sus espacios en la oscuridad de la noche es una vivencia que parece desafiar la realidad, recomendada solo para los más valientes.
Centro de Salud Preventivo de Aigües (Alicante)
Inicialmente diseñado como un lujoso resort con una amplia gama de servicios, el Preventorio de Aigües fue inaugurado en el siglo XIX. Con el tiempo, sin embargo, se transformó en un centro dedicado al tratamiento de la tuberculosis infantil.
A pesar de los intentos por recuperar su antiguo esplendor hotelero, el edificio hoy se mantiene en desuso.
Moya (Cuenca)
Las ruinas de Moya se encuentran a 1100 metros de altura, dominando el paisaje tal como lo hacían en su época de esplendor. En el medioevo, llegó a albergar un castillo, numerosos templos, conventos, hospitales y hasta ocho puertas que flanqueaban su muralla.
Su importancia histórica es tan significativa que, debido a su relevancia arqueológica, este sitio ha sido reconocido como un conjunto Monumento histórico-artístico.
Fortaleza de San Cristóbal (Navarra)
También conocido como Fuerte de Alfonso XII, este imponente fuerte se destaca en la historia por un récord insólito: el mayor número de prisioneros fugados en España, con un total de 795. Fue construido en el siglo XIX con el propósito de proteger Pamplona tras los conflictos carlistas.
En 1841 cesaron sus actividades y se transformó en un sanatorio para enfermos de tuberculosis, que funcionó hasta 1991. En la actualidad, el complejo es propiedad del Ministerio de Defensa.
Cívica (Guadalajara)
Esta pedanía de Brihuega se sitúa en las laderas montañosas. Los arquitectos de esta localidad lograron armonizar sus viviendas con la topografía moldeada por el río Tajuña a lo largo de los siglos, incorporando las cuevas y cavidades naturales del terreno en su diseño arquitectónico.