El Gobierno español está a punto de aprobar una medida histórica: la regularización de más de 500.000 inmigrantes que residen en el país sin papeles. Impulsada por el PSOE, la iniciativa cuenta con el respaldo de la mayoría de los grupos parlamentarios, excepto Vox, y se basa en una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) respaldada por más de 600.000 firmas ciudadanas.
La propuesta contempla conceder permisos de residencia y trabajo a quienes hayan llegado a España antes del 31 de diciembre de 2024, mediante una "autorización por circunstancias excepcionales única".
Este giro en la política migratoria responde a las deficiencias del nuevo reglamento de extranjería, que, según el propio PSOE, deja fuera a colectivos vulnerables como solicitantes de asilo rechazados. Además, se busca atender la demanda de mano de obra en sectores como la agricultura, la hostelería y los cuidados, donde la falta de personal es acuciante.
Una oportunidad para miles de personas
La propuesta del PSOE plantea una regularización extraordinaria mediante una "autorización por circunstancias excepcionales única", que permitiría a los beneficiarios residir y trabajar legalmente en todo el territorio nacional. Aunque los requisitos específicos aún no se han detallado, se establecerán mediante un Real Decreto posterior.
La medida busca corregir las carencias del nuevo reglamento de extranjería, que, según el propio PSOE, deja fuera a colectivos vulnerables como solicitantes de asilo rechazados. Además, se busca atender la demanda de mano de obra en sectores como la agricultura, la hostelería y los cuidados, donde la falta de personal es acuciante.
Apoyo mayoritario y oposición de Vox
La iniciativa cuenta con el respaldo de la mayoría de los grupos parlamentarios, incluidos Sumar, Podemos, BNG y PNV. Estos partidos han exigido mayor concreción, plazos más breves y una ampliación en la cobertura de la medida. Podemos, por su parte, ha instado al Gobierno a aprobar la regularización por decreto, argumentando que "mañana mismo podría hacerlo".
El Partido Popular, que inicialmente apoyó la toma en consideración de la ILP, ha retirado su respaldo, alegando que el PSOE ha ignorado sus enmiendas, como exigir antecedentes penales limpios y procesos individualizados. Vox, por su parte, se mantiene firme en su rechazo y ha presentado una proposición para restringir las vías actuales de regularización.
Un paso hacia la inclusión y la justicia social
La regularización de más de 500.000 inmigrantes representa un avance significativo en la política migratoria española y un paso hacia la inclusión y la justicia social. La medida no solo busca corregir las deficiencias del sistema actual, sino también reconocer la contribución de miles de personas que, pese a vivir en la irregularidad, han estado trabajando y aportando a la sociedad española.
Si se aprueba, esta regularización extraordinaria marcará un hito en la historia reciente de España y podría sentar un precedente para futuras políticas migratorias más inclusivas y humanas.