

En un clima político marcado por las tensiones, el último pleno del Congreso dejó fuertes acusaciones cruzadas entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo.
La corrupción volvió a ocupar el centro de la escena, impulsada por el “último informe de la UCO” sobre Santos Cerdán, que agitó un debate ya encendido.

Las denuncias de Feijóo y las primeras réplicas
El líder del PP se dirigió al presidente del Gobierno “en muy duros términos” al acusarlo de haber transformado la sede de Ferraz en una “cloaca”. Feijóo recurrió a las revelaciones del informe policial para señalar que Sánchez habría trasladado esas prácticas a la Moncloa.
Feijóo utilizó este ataque incluso en una pregunta sobre los presupuestos. Señaló que Sánchez ignoró iniciativas ya aprobadas para “rebajar el IRPF”, “derogar la ley de vivienda” y “agilizar el desalojo de okupas”. También lo calificó de “insumiso” con el Parlamento.
La respuesta del presidente llegó de inmediato. Sánchez recordó al expresidente valenciano Carlos Mazón, “acosado por su gestión de la dana”, y la reciente detención del “presidente de la Diputación de Almería, Javier Aureliano García” en una causa por compra fraudulenta de mascarillas.
Sánchez defiende su gestión económica y ataca la “doble vara”
Pedro Sánchez reivindicó los datos económicos como respuesta al cruce político. Destacó que “el techo de gasto para las nuevas cuentas públicas sube a un histórico 8,5 %” y que esto permitirá avanzar hacia “unos presupuestos con más sesgo social para 2026”.
El jefe del Ejecutivo también cuestionó la posición del PP ante los casos de corrupción internos. Remarcó que Feijóo no podía dar lecciones de ejemplaridad “cuando lleva un año aplaudiendo a Mazón”. El presidente añadió: “Mírese antes en el espejo”.
Además, Sánchez insistió en que la respuesta de su partido ante cualquier irregularidad se resume en una consigna: “Tolerancia cero frente a la corrupción”. Subrayó que el PP mantiene “cero respuestas” cuando los casos lo afectan.
Las críticas se extienden: PP, Vox y Junts presionan al Gobierno
La sesión no se limitó al cruce entre Sánchez y Feijóo. Desde el PP insistieron con nuevas preguntas sobre corrupción, lo que generó respuestas similares por parte de los ministros del Gobierno.
La vicepresidenta María Jesús Montero exigió al PP que “explique lo que pasa en la Diputación de Almería”. Desde la oposición, la portavoz Ester Muñoz acusó al presidente de “montar una trama organizada” como forma de gobierno.
Vox también intervino en el debate. Su portavoz, Pepa Millán, afirmó que los socialistas “han llegado al poder solo para robar”. Félix Bolaños replicó que Vox defiende una España “reaccionaria” y “gris”.
Junts, por su parte, centró las críticas en los presupuestos. Miriam Nogueras acusó a Sánchez de “hacer teatro” con las cuentas públicas y advirtió que el Gobierno “no tiene los votos” necesarios. También enumeró “mentiras” e “incumplimientos” con Cataluña.













