

El futuro de WhatsApp en Rusia está en duda. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, advirtió este viernes que la popular aplicación de mensajería, propiedad de Meta, debe cumplir con las leyes locales si desea seguir operando en el país.
La declaración llega en medio de crecientes rumores sobre un posible bloqueo de la plataforma, similar a lo que ya ocurrió con otras redes sociales occidentales como Facebook e Instagram.
Las declaraciones del Kremlin se producen mientras el gobierno ruso avanza en la creación de una lista de software extranjero proveniente de "países hostiles", que estaría sujeta a restricciones o prohibiciones. Meta, matriz de WhatsApp, ya ha sido declarada como "organización extremista" por Moscú, lo que pone aún más presión sobre sus servicios.

Rusia avanza en la restricción de servicios digitales extranjeros
Las tensiones entre Rusia y las grandes tecnológicas occidentales no son nuevas, pero se han intensificado desde el inicio de la guerra en Ucrania en 2022. Desde entonces, el Kremlin ha restringido o bloqueado el acceso a medios opositores, aplicaciones de mensajería y redes sociales, en un intento por controlar el flujo de información en el país.
En ese contexto, el diputado ruso Antón Gorelkin fue aún más directo que el Kremlin. "Es hora de que WhatsApp se prepare para salir del mercado ruso", afirmó. Y añadió: "Es muy probable que el servicio de mensajería, perteneciente a la organización extremista Meta, se incluya en la lista de software de países hostiles sujetos a restricciones, que el gobierno ruso está elaborando por orden del presidente".
Según Gorelkin, la mencionada lista deberá estar lista "hasta el 1 de septiembre". Este documento definiría qué plataformas o aplicaciones extranjeras estarían sujetas a prohibiciones o bloqueos automáticos en territorio ruso.
¿Qué app reemplazaría a WhatsApp en Rusia?
Ante el eventual vacío que podría dejar WhatsApp, las autoridades rusas ya tienen una alternativa sobre la mesa. "El hueco que deje WhatsApp lo puede ocupar la aplicación nacional de mensajería MAX", afirmó Gorelkin.
MAX es una app desarrollada en Rusia que busca posicionarse como una opción segura y alineada con los intereses del gobierno. No sería la primera vez que el país impulsa el uso de software local como respuesta a bloqueos o sanciones tecnológicas por parte de Occidente.
Esta estrategia refleja una tendencia creciente en países con fuertes controles sobre internet: reducir la dependencia de plataformas extranjeras y fortalecer un ecosistema digital nacional. China, por ejemplo, ya bloquea WhatsApp desde 2017 y utiliza servicios propios como WeChat.
Meta, en el centro de la disputa digital con Rusia
Meta, empresa matriz de WhatsApp, Facebook e Instagram, fue declarada "organización extremista" por la justicia rusa en 2022. Desde entonces, varias de sus plataformas han sido bloqueadas en territorio ruso, mientras se intensificaban las restricciones a medios independientes y servicios de mensajería que no colaboran con el gobierno.
El posible bloqueo de WhatsApp supondría un paso más en la estrategia del Kremlin de aislar su entorno digital del control occidental. Aunque todavía no hay una fecha oficial ni una orden directa de cierre, las señales desde el gobierno son claras.
"El servicio más popular del país" podría quedar fuera de juego si no se adapta al marco legal ruso. La cuenta regresiva, según el propio gobierno, finaliza el 1 de septiembre.
















