Actualmente, la edad ordinaria de jubilación para los trabajadores en España se encuentra fijada en 66 años y 8 meses. A su vez, las personas que tienen más de 38 años y tres meses cotizados, pueden retirarse al alcanzar los 65 años. Estos límites fueron expandidos a principios de 2025 y seguirán creciendo a lo largo de los próximos años. El objetivo es asegurar la sostenibilidad del sistema público de pensiones.
Debido al aumento de la esperanza de vida y el descenso de la natalidad, en España hay cada vez más personas jubiladas y menos contribuyentes. Esta situación motivó un cambio en el sistema que irá incrementando la edad jubilatoria hasta 2027, momento en donde quedará fijada en los 67 años.
Según anunció el Gobierno, existen diferentes beneficios y mejoras para los ciudadanos que opten por retrasar su jubilación. El objetivo es asegurar el poder adquisitivo de los pensionistas, uno de los grupos más afectados tras las subidas de precios vividas en los últimos años.
La Seguridad Social ha optado por crear una fórmula a través de la jubilación demorada para que los trabajadores puedan prolongar su vida laboral. Así podrán desempeñar su labor profesional a cambio de disfrutar de distintos beneficios en su futura prestación.
¿Cuáles son los beneficios de retrasar la jubilación?
Aquellas personas que decidan retrasar su jubilación de forma voluntaria, podrán disfrutar de una serie de beneficios económicos. Los porcentajes adicionales variarán en función de los plazos de extensión.
Incremento en la base regulatoria
un porcentaje adicional del 4% por cada año completo cotizado tras haber alcanzado la edad ordinaria de jubilación. Este porcentaje será aplicado sobre la base reguladora que se utiliza para calcular la pensión.
Pago único
una cantidad fija por cada año de demora, que varía entre 5000 y 12.000 euros, dependiendo del importe de la pensión y del número de años cotizados.
Opción mixta
una combinación de las dos opciones anteriores, disponible para los trabajadores que retrasen su jubilación al menos dos años.
A su vez, el retraso de seis meses recibirá una bonificación del 2%. Superados los dos años de jubilación demorada, se aplicará un 2% extra por cada semestre adicional. Esta medida está diseñada para evitar situaciones en las que los trabajadores, al retrasar su jubilación por períodos fraccionados que no completan un año entero, no reciban ningún beneficio adicional.
Requisitos para acceder a la jubilación demorada
Para acceder a los beneficios de la jubilación demorada, los trabajadores deben cumplir con ciertos requisitos:
Haber cotizado un mínimo de 15 años a la Seguridad Social.
Estar al corriente de pagos a la Seguridad Social.
Haber alcanzado la edad legal ordinaria de jubilación para el año en curso, actualmente establecida en 66 años y 8 meses o 65 años en caso de haber cotizado por 38 años y tres meses.
No es cierto que la jubilación demorada solo se puede disfrutar hasta los 70 años, ya que la Seguridad Social no impone un límite de edad para acceder a este beneficio.
Cómo solicitar la jubilación demorada
Para solicitar la jubilación demorada se debe hacer la gestión de solicitud en el INSS. Para ello, se deberá cumplimentar el apartado dedicado a la jubilación demorada en el formulario de solicitud de la pensión.
Este trámite no se trata de una prestación como otras que se pueden solicitar online fácilmente. Debido a sus particularidades, es recomendable contar con el asesoramiento de un abogado especializado. Este profesional podrá realizar un cálculo de jubilación demorada personalizado y ver los incentivos económicos adicionales pertinentes a los que se puede acceder en cada caso.