

Conducir un vehículo requiere no solo experiencia y habilidades técnicas, sino también un estado de salud óptimo. La seguridad vial depende de que los conductores mantengan sus capacidades físicas y mentales en buen estado para reaccionar de manera adecuada en la carretera.
En España, la Dirección General de Tráfico (DGT) establece normativas estrictas para garantizar que quienes se ponen al volante cumplan con estos requisitos, especialmente en el caso de los mayores de 65 años.
Por esta razón, al renovar el carnet de conducir, es obligatorio someterse a un reconocimiento médico que evalúa la aptitud del conductor. En el caso de las personas mayores, este examen es más exhaustivo, ya que la DGT considera que algunas enfermedades pueden aumentar el riesgo de accidentes.
De acuerdo a los resultados, pueden aplicarse restricciones, reducciones en la validez del carnet o, en casos más graves, la denegación de la renovación.

Las enfermedades por las que la DGT podría no renovar el carnet de conducir en 2025
La DGT cuenta con un listado de enfermedades que pueden afectar la capacidad de conducción, y evalúa tanto la gravedad de la patología como la efectividad del tratamiento.
En el caso de los mayores de 65 años, afecciones como el Alzheimer, el Parkinson o las enfermedades cardiovasculares pueden representar un riesgo al volante más agudo por lo que cabe destacar un exhaustivo examen medico.
Entre las enfermedades que pueden impedir la renovación del carnet de conducir en mayores de 65 años se encuentran:
- Enfermedades degenerativas, neurológicas y crónicas: Alzheimer, Parkinson, esclerosis lateral amiotrófica.
- Trastornos psiquiátricos: demencia, ansiedad, depresión, trastorno obsesivo-compulsivo.
- Enfermedades vasculares: disección, aneurismas de grandes vasos.
- Patologías cardíacas: arritmias, infarto agudo de miocardio, prótesis valvulares, marcapasos o desfibriladores automáticos.
- Enfermedades neurológicas: epilepsia, crisis o pérdidas de conciencia, accidentes isquémicos transitorios.
- Trastornos endocrinos: hipotiroidismo, disfunciones de las paratiroides, diabetes mellitus insulinodependiente.
- Enfermedades digestivas: nefropatías con diálisis o trasplante renal.
- Problemas respiratorios: apnea del sueño.
- Cáncer y trastornos oncohematológicos.
¿Qué hacer si una enfermedad afecta la renovación del carnet?
Si una persona mayor de 65 años padece alguna de estas enfermedades, deberá presentar un informe médico favorable que certifique la ausencia de riesgos. En algunos casos, la DGT impone restricciones, como la reducción del período de validez del carnet, en lugar de una negativa total.
No obstante, si la patología compromete gravemente la seguridad en la conducción, la renovación será negada. Garantizar que los conductores estén en condiciones óptimas para manejar es fundamental para prevenir accidentes.















