

Tras la llegada del buen tiempo y las temperaturas elevadas, es común que muchos conductoresopten por la comodidad al vestir. Entre esas decisiones, conducir con chanclas puede parecer una elección inocente, pero en realidad supone un riesgo considerable para la seguridad vial.
La clave está en mantener el control total del vehículo. Un calzado inadecuado puede dificultar el manejo preciso de los pedales, al aumentar la posibilidad de cometer errores o reaccionar con lentitud ante imprevistos. Por eso, aunque muchos lo ignoren, elegir el calzado correcto al conducir es tan importante como usar el cinturón de seguridad.

El Reglamento General de Circulación no menciona expresamente qué tipo de calzado está prohibido. Sin embargo, el artículo 18.1 deja claro que "el conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción, que garanticen su propia seguridad, la del resto de los ocupantes del vehículo y la de los demás usuarios de la vía".
Esto implica que un agente de tráfico puede sancionar a un conductor si considera que el calzado elegido supone un riesgo para la seguridad. No es una cuestión de moda o comodidad: si el calzado impide un correcto manejo del vehículo, puede derivar en una multa.
¿Con qué calzado no se puede conducir?
La Dirección General de Tráfico (DGT) indica que el calzado debe permitir un buen tacto con los pedales. Por ello, hay tres tipos de zapatos que no deberías utilizar si vas a conducir:
- Chanclas, sandalias o crocs: está estrictamente prohibido conducir con chanclas o calzado similar porque no se sujetan bien al pie. De hecho, si se te despegan del mismo, pueden llegar a bloquear el movimiento de algún pedal, con el riesgo que esto supone.
- Zapatos de tacón: no son los más indicados para conducir porque no permiten tener un buen control de los pedales, además de que los tacones se pueden enganchar en un momento dado, impidiéndote pisar con precisión tanto el pedal del freno, el embrague o el acelerador.
- Botas: por norma general, conducir con este tipo de calzado, sobre todo las botas de seguridad o de montaña, no es recomendable porque es pesado y resta sensibilidad a la hora de pisar cualquier pedal. Tus gestos se vuelven más imprecisos y torpes, de ahí que sea un posible motivo de sanción su uso.

¿Qué calzado es adecuado para conducir?
En un informe sobre calzado y conducción publicado en el sitio web del RACE se concluye cuál debe ser el calzado adecuado para conducir, teniendo en cuenta que debe cumplir con las siguientes características:
- Debe ir bien sujeto al pie.
- Debe transmitir con precisión la fuerza a los pedales.
- La suela no debe resbalar con la goma de los pedales, es decir, debe ser antideslizante.
- No debe tener adornos o lazos que se enganchen.
- No deben ser grandes ni pesados: debes evitar pisar dos pedales a la vez de forma accidental.
- Deben tener auto cierre o utilizar cordones ajustados.
¿Cuál es la multa por llevar un calzado inadecuado?
Por normal general la multa es de 80 euros, porque el agente puede considerar que los zapatos inadecuados no permiten una conducción segura.












