Un billón de pesos, entre prestaciones e inversiones del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), es lo que maneja anualmente el director ejecutivo de la Anses, Diego Bossio. Lo astronómico de esa suma y lo estratégico de las decisiones de la Anses hace que cada uno de los presidenciables con más chances de llegar a la Casa Rosada piense por estas horas detenidamente a qué hombre o mujer de confianza pondrá a manejar los destinos del organismo previsional. Y todos ya tienen algún nombre en mente.
El candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, analiza varias opciones para poner al frente de este virtual ministerio. La más fuerte y que viene sonando hace semanas es la del actual titular del Banco Provincia (Bapro), Gustavo Marangoni. Integrante de la mesa chica del sciolismo, acompaña al gobernador desde hace 18 años y tras oficiar como su vocero había sido elegido por él para disputar la Ciudad de Buenos Aires. Aspiración que debió olvidar, al menos este año, después del pedido público de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner para que la multiplicidad de candidatos del oficialismo a todos los cargos en disputa se den "un baño de humildad".
Pero Marangoni, que hoy maneja los 10.000 millones de activos del Bapro, con sus 420 sucursales y más de diez mil empleados, no está solo en la danza de nombres del sciolismo para la Anses. También suena el actual secretario General de la Gobernación, Martín Ferré, otro que acompaña a Scioli desde los comienzos de su carrera política. Tuvo cargos legislativos y fue, además, ministro de la Producción y de Desarrollo Social, dos áreas que se entrecruzan con el radio de acción del organismo previsional.
Además hay un actual gobernador que estuvo sonando para integrar el equipo del bonaerense. Se trata del chaqueño Jorge Capitanich, intendente electo de Resistencia, quien en las últimas horas rechazó haber recibido cualquier ofrecimiento. "Mi compromiso ha sido con el Municipio de Resistencia y con el votante", aseguró, a pesar de que las usinas sciolistas repiten su nombre.
Para el PRO el tema está todavía indefinido. El único posible candidato es un economista que en 2013, en pleno auge del Frente Renovador, el Banco Ciudad le "robó" a Sergio Massa. Se trata de Hernán Lacunza, actual gerente General del Banco Ciudad, puesto que también ocupó en el Banco Central durante la gestión de Martín Redrado.
En Tigre, en cambio, la eventual sucesión de Bossio está clarísima. No es para menos. Massa dirigió la Anses durante más de cinco años y tiene un plan para el organismo: separarlo de la gestión del FGS. A cargo de la administración del Fondo quedaría Carlos Hourbeigt, director de la Escuela de Gobierno del Frente Renovador que debe formar a los más de 1.300 funcionarios que deberían acompañar una eventual presidencia de Massa, e integrante del equipo del ex ministro de Economía Roberto Lavagna. El candidato a dirigir la Anses, en tanto, es Alberto Freire, que fue gerente de Jubilaciones durante la gestión de Massa al frente del organismo previsional.