La escalada del precio internacional de las commodities y específicamente la soja, hace unos meses es título y tema central de los diarios más importantes del mundo. Sin embargo, hay que recordar que los niveles de precios actuales son históricamente altos. Sin tener en cuenta mayo del año pasado -cuando la tonelada tocó un pico de 608 dólares- desde la campaña de 2011 no sucedía un rally alcista de esta índole.
En cuestión de minutos, el valor de la soja en la Bolsa de Chicago pasó de ganar casi 6 dólares a 8 dólares por encima del precio del martes. Abrió el miércoles a u$s 576 y cerró a u$s 584 por tonelada.
En el medio de la jornada, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) publicó su informe mensual de estimaciones agrícolas e informó un recorte de producción de 8,7 millones de toneladas para Argentina, Brasil y Paraguay. El ajuste, sin embargo, fue menor al calculado por los operadores.
"La menor producción Sudamericana hará que Argentina y Brasil exporten menos harina de soja, entonces se espera que en Estados Unidos aumente la industrialización de soja y eso explicó el impacto positivo en los precios", detalló Tomás Rodríguez Zurro, economista de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
El mercado estaba expectante de qué iba a informar el organismo específicamente respecto a Latinoamérica. Para Brasil informó 134 millones de toneladas, cuando se esperaban 500.000 toneladas menos.
"Las consultoras privadas ya estiman por debajo de 130 millones de toneladas para Brasil pero el USDA siempre es más cauteloso en sus ajustes de producción", explicó a El Cronista Zurro, especialista de la BCR.
Lo que los operadores parecieron tener en cuenta ante la suba de precios fue el hecho de que, quizás, la previsión del USDA para Brasil es resultado de una visión conservadora de la situación vigente. Lo que ocurra en las próximas semanas con el clima en Brasil y en la Argentina podrá acentuar la firmeza de los precios.
En su informe mensual, redujo de 46,5 a 45 millones de toneladas su proyección sobre la cosecha final de soja argentina. Sin embargo, el mercado esperaba que efectivamente se recorte a 44,5 millones de toneladas.
En Paraguay proyectó 6,3 millones de toneladas, un segundo recorte, luego del que había hecho en enero. En total, habrá 8,7 millones de toneladas menos.
El maíz, por su parte, en Argentina no tuvo modificaciones y se mantiene la estimación de 54 millones de toneladas. "Este dato del USDA nos sorprendió. En los maíces tempranos desde la Bolsa vemos un impacto de la sequía. Esperamos una caída en lo rindes de 48 millones de toneladas, es decir serán 6 millones de toneladas menos de las que informó el organismo", agregó Rodríguez Zurro.
De esta manera, el cereal ganó 2,29%, cerró casi 6 dólares por encima del martes y alcanzó su máximo valor en 8 meses.
"El hecho de que en Brasil las lluvias sigan afectando el tránsito normal de las cosechadoras en zonas clave como Mato Grosso y que las previsiones meteorológicas auguren poca humedad en los próximos días sobre buena parte de las zonas agrícolas de la Argentina hace pensar a los operadores que los vistas hoy no serán los últimos ajustes", marcó la corredora Granar.
Sobre el trigo, desde Estados Unidos se prevé a nivel global un mayor consumo. Por eso, nuestro país exportará más. Antes se estimaban 13,5 millones de toneladas que pasarán a ser 14 millones. Por último, el trigo avanzó 0,80% (US$ 2,30) y se posicionó en US$ 288,44 la tonelada