En esta noticia

El economista Carlos Melconian volvió a advertir por la improvisación del programa económico y el rumbo que éste tomó en las últimas semanas, al que calificó como una "crónica de una cuestión anunciada", y puso en duda que el Gobierno tenga la situación bajo control.

En una entrevista radial, el expresidente del Banco Nación afirmó que la "realidad" se está imponiendo sobre el plan oficial, generando una dinámica que ya no solo es advertida por los analistas, sino también por sectores clave de la economía.

En esa línea, Melconian desestimó que, tal como suele decir el propio Javier Milei, "todo marcha acorde a lo planeado". Por el contrario, sostuvo que las decisiones se toman únicamente como algo necesario para evitar un mal mayor.

"Todo marcha acorde al ritmo que impone la realidad", sentenció en diálogo con Radio Rivadavia.

Fragilidad cambiaria y preocupación por la salida de divisas

El foco de su preocupación, explicó, se centra en la situación cambiaria. Para Melconian, la presión sobre el dólar es la consecuencia de desequilibrios más profundos, y recordó sus advertencias al anticipar que un dólar a $ 1.150 "estaba más para subir que para bajar".

"Esa no fue una definición de terrorismo económico, sino en una definición de sentido común", apuntó.

Además, y para graficar la magnitud de la salida de divisas, Melconian utilizó una metáfora contundente que apunta directamente al drenaje generado por las personas físicas, ya sea por el turismo o por la dolarización de ahorros.

"En tres meses se fumaron Vaca Muerta de un año", afirmó, al calcular que la demanda de dólares del sector privado alcanzó los 10.000 millones de dólares, una cifra cercana a todo el superávit energético anual que se proyecta, que se fija en 12.000 millones.

Bajo esta perspectiva, el economista insistió en señalar que el tipo de cambio actual no es de equilibrio, independientemente de la tasa de interés que fije el Banco Central. "Mientras el segundo país que más divisas venda para el turismo en República Dominicana sea Argentina, ese tipo de cambio no es de equilibrio por más que inventes la tasa que inventes", subrayó.

Melconian también criticó lo que consideró un "apresuramiento innecesario" en las primeras medidas del Gobierno, como la eliminación del cepo para personas humanas. A su entender, estas decisiones se tomaron fuera de tiempo y sin tener las condiciones macro necesarias para sostenerlas, lo que a la larga contribuyó a la presión cambiaria actual.

En cuanto a la reciente suba de tasas de interés, el economista se mostró escéptico de que sea la solución de fondo.

"El equilibrio no llega por poner una tasa extravagante que genere morosidad y recesión. El equilibrio por las buenas es un equilibrio donde el tipo de cambio tenga un valor de verdad de tipo de cambio flotante, donde el Gobierno compre todo lo que tenga que comprar y el turismo local sea superior al turismo extranjero" explicó.

Al pensar en lo necesario para obtener estabilidad cambiaria de largo plazo, Melconian cree que el oficialismo depende casi exclusivamente de dos factores cruciales que aún no están resueltos: la capacidad del Banco Central de acumular reservas de forma sostenida y tener un plan claro para afrontar el financiamiento en dólares de los vencimientos de deuda a partir de 2026.

El economista también cuestionó la gestión de la política monetaria, criticando la "volatilidad" y la falta de un rumbo claro. Afirmó que el Banco Central no puede "jugar a ser la Reserva Federal Americana", y que necesita una estrategia más "modesta", acorde a las fragilidades de la economía argentina.

"Tienen que tratar de saber cuál es la política económica y cómo la entiende el mercado. Por ejemplo, ahora que compraron dólares, ¿por qué se hace de una manera tan poco transparente? ¿Por qué no va el Banco Central con emisión monetaria o el Tesoro con superávit fiscal y compra transparentemente? ¿Para qué perdimos tiempo desde abril hasta ahora diciendo que si no va a $ 1000 no compra? Todos los que avisamos esto éramos mandriles", concluyó.