

La Argentina y España tienen gobiernos con una "plena sintonía en materia económica y política exterior", que pese a las crisis pasadas, ven que sus economías "vienen bien". Tales apreciaciones compartieron ayer el presidente Mauricio Macri y su par español, Mariano Rajoy, tras una reunión que les sirvió para repasar la agenda bilateral y renovar el "plan de acción" lanzado en febrero de 2017, cuando el jefe de Estado recaló en La Moncloa.
Macri y Rajoy compartieron poco más que medio día, entre la asistencia al Encuentro Empresarial EspañaArgentina, las reuniones de trabajo en Casa de Gobierno, y el almuerzo de honor a los visitantes ofrecido en el Museo de la Casa Rosada.
El primer mandatario y el líder del Partido Popular (PP) ofrecieron una declaración luego de verse en privado y tras recibir a diez ejecutivos de empresas que cotizan en la bolsa española, que plantearon inquietudes por la inflación, que no cede, y por las reformas que aguardan. A ellos, Macri y Rajoy dedicaron palabras más tarde.
El presidente agradeció la nutrida delegación empresaria que llegó a Buenos Aires, y les reiteró que el Gobierno insistirá con su "agenda de reformas" para ser "creíbles y confiables".
"Hemos emprendido una agenda de reformas, y todas las cosas que prometimos hacer, las estamos haciendo, para ser creíbles, confiables, y que ustedes sientan que recorrer juntos los desafíos del siglo XXI van a resultar también en beneficio de los españoles", lanzó Macri desde el atril del Salón Blanco.
A su turno, Rajoy subrayó los cambios del macrismo y recordó que "la seguridad jurídica y la previsibilidad son indispensables para generar riqueza", lo que despertó la reminiscencia de la expropiación de Repsol YPF, en 2012.
El gallego nació en Santiago de Compostela consideró que "la presencia empresarial de España en la Argentina es potente", e incluso se aventuró a decir que el reino podría volver a ser el primer inversor extranjero, por encima de los Estados Unidos. A la hora de las preguntas, el presidente de gobierno reconoció haber visto muchos empresarios connacionales "con muchas ganas, con entusiasmo de invertir en la Argentina y de obtener contratos". También dijo haber animado a los hombres de negocio a "creer en este futuro compartido, porque ambas economías van bien y existe buena sintonía entre gobiernos, lo cual siempre es bueno para generar riqueza y empleo".
El grueso de las inversiones ibéricas se enfocan en el mercado de las telecomunicaciones, que el Gobierno prevé regular con una norma supletoria de la extinta Ley de Medios; en el sector financiero, que será impactado por la nueva ley del mercado de capitales, y en transporte e infraestructura, donde varios consorcios participaron de proyectos públicoprivados que pronto se adjudicarán. Además de eso, Macri reiteró su objetivo de bajar el déficit fiscal y remover trabas burocráticas.
Durante la visita, ambos gobiernos firmaron cinco acuerdos para facilitar programas de estudio y trabajo para jóvenes, la adopción de trámites digitales, la "cooperación en materia de recursos hídricos", el cuidado del medioambiente, y futuros negocios en infraestructura y transporte. Anunciaron un convenio sobre estancias para estudios doctorales y posdoctorales, y pese a haber hablado sobre un marco de cooperación sobre la pesca en el Atlántico sur, no hubo expresiones oficiales al respecto. Es sabido que varias firmas españolas pescan en aguas cercanas a Malvinas, en zonas arrendadas por el gobierno de las islas, que la Argentina no reconoce.













