El Gobierno espera la liquidación de la cosecha gruesa para apuntalar sus reservas de dólares y los ingresos del fisco, punto clave para lograr el déficit cero al que apuntan Javier Milei y su ministro de Economía, Luis Caputo, para fin de año.
Sin embargo, el analista financiero especializado en agronegocios, Salvador Di Stefano, advirtió que las exportaciones del campo este año pueden ser menor de lo esperadas, lo que se convertiría en un fuerte "dolor de cabeza" para las cuentas de Milei.
En el último informe publicado en su sitio web, el llamado "Gurú de la City" alertó sobre el difícil contexto climático al que se enfrenta el sector agropecuario: pese a que la sequía del año pasado terminó, hay otros factores que presionan sobre el rubro.
Es por eso que, aunque "el mercado de capitales está dando por sentado que Argentina tendrá una gran exportación de oleaginosas, cereales y carnes", para Di Stefano estos "se equivocan".
Según el analista, "la concurrencia de problemas climáticos y enfermedades en las plantas" lo lleva a "ser pesimista sobre el fuerte ingreso de divisas en los próximos meses": su análisis.
La advertencia para Javier Milei del Gurú de la City
Según el análisis de Salvador Di Stefano, el sector agropecuario tendrá un año peor del esperado por el Gobierno y analistas económicos. En particular, la cosecha de maíz se encuentra bajo una fuerte influencia de distintos factores:
- Concurrencia de lluvias en exceso;
- Sequías en el norte argentino pocas veces vista;
- Chicharrita que transmite el spiroplasma, una enfermedad en las plantas de maíz que pueden hacer reducir su producción en hasta un 70%, y;
- Ráfagas de viento de hasta 120 kilómetros por hora que tumban plantas y abortan la producción.
Frente a esto, "si hay una merma en la cosecha de maíz que supere los 10 millones de toneladas, la economía comenzará a sentir los efectos colaterales", alertó Di Stefano.
Entre los problemas que advierte el analista por la mala cosecha de maíz habrá "menos dólares para las reservas, más precio a los alimentos (por menor producción), quebrantos en muchas explotaciones agropecuarias, y un efecto pobreza focalizado en las provincias que son grandes productoras".
El trigo también "viene complicado" debido a los bajos precios internacionales y los elevados impuestos en el país, señala el especialista, lo que desincentiva la intención de siembra. Finalmente, aunque se espera que ingresen más dólares por la soja que el año pasado, igualmente los números pueden caer debido a cuestiones climáticas.
Es por esto que para el analista "estamos en el peor escenario" con "pocas cantidades, precios altos para el mercado interno y baja rentabilidad para el productor".
Desde el lado de los ingresos fiscales para el Estado, el Gobierno tendrá menos dinero por bajas liquidaciones y, por ende, "pocos dólares a las reservas".
"Cuidado que el flujo esperado de dólares del campo no está, vendrán dólares, pero menos de los que desean la media de consultores y el Gobierno, y esto puede cambiar el escenario de la economía nacional", advierte el "Gurú" para cerrar.