Luego de que la diputada bonaerense Natalia Sánchez Jaureguicambiara de bando político al unirse al bloque de legisladores provinciales del Frente de Todos luego de haber sido elegida en 2019 dentro de la coalición opositora de Juntos por el Cambio en representación del Partido Fe, el diputado nacional Fernando Iglesias le pidió su renuncia en un tenso debate televisivo en vivo.
Jauregui, referente de UATRE y de tradición peronista, ya se había desligado del interbloque de Juntos por el Cambio en la legislatura provincial y conformaba un bloque único, lo que llevó a la controvertida decisión que comunicó a través de sus redes sociales el pasado 15 de diciembre: unirse al bloque oficialista en la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires.
Así, tal como explicó en su comunicado la legisladora, esta transición se dio para "reforzar el trabajo conjunto" que Jauregui asegura que ya se encuentra llevando a cabo con las autoridades provinciales "a fin de llevar adelante proyectos de inclusión, producción y desarrollo en toda la provincia".
Ante el sorpresivo anuncio, la decisión de la legisladora bonaerense tuvo una fuerte repercusión en todo el espectro político opositor, con duras críticas de parte de referentes de Juntos por el Cambio, encabezadas por el diputado nacional Waldo Wolff: "Que ser cobarde no valga la pena", disparó en Twitter el funcionario del PRO, etiquetando a Jauregui.
En este marco, el colega de Wolff en la Cámara Baja Nacional, Fernando Iglesias, se cruzó al aire con la legisladora provincial que cambió de bando y le exigió su renuncia: "Uno no puede tener los valores de la república, los valores de la lucha contra la corrupción, y al otro día pasarse al Frente de Todos, aquí se debe una renuncia", le reprochó en vivo Iglesias a Jauregui en el debate organizado por TN.
Sin embargo, la funcionaria tildada de "traidora" dentro de Juntos por el Cambio sostuvo su postura: "Represento a un sector -el Partido Fe- que se integró y después fue engañado como muchos de los argentinos, fue una gran decepción, no éramos considerados, no formábamos parte de la mesa de decisión, éramos ninguneados", se defendió para explicar su decisión.
Además, reveló que recibió una catarata de críticas malintencionadas, desde "desearle el cáncer" hasta que su familia sufra "desgracias", la exposición y publicación de fotos de sus hijos o "escraches" por teléfono: "Estoy siendo crucificada porque internamente tienen un gran problema", denunció.
Ante esto, Iglesias contestó: "Diputada, acá nadie cuestiona que usted pueda decir 'yo no quiero formar más parte de esta agrupación política porque considero que ha traicionado', aunque me parece una acusación falsa e injusta usted tiene derecho, pero renuncie a su banca y se va a otro lado", le exigió el funcionario nacional.
No obstante, Jauregui se mantuvo firme en su postura y aseguró que no renunciará: "El Partido Fe puso su gente, lo convocaron porque llevó un caudal de votos del peronismo que ustedes no tenían, nos convocaron y después nos dejaron afuera de las decisiones", criticó nuevamente, remarcando que considera que se aisló al Partido Fe dentro de la coalición. Iglesias, por su parte, concluyó con dureza: "Hágase cargo, ustedes engañaron a la gente, son unos caraduras".
Sergio Berni, ministro de Seguridad bonaerense también presente en el piso, defendió entonces a Jauregui, diferenciando la representación de un partido político del de una coalición: "En nuestro sistema político electoral se representan los intereses de los partidos políticos, cuando uno es nombrado diputado es representante de los argentinos pero cuando entra en una lista entra por un partido político, no por una coalición", recalcó el funcionario de Axel Kicillof para cerrar el debate.