Paolo Menghini, padre de un joven que murió en la tragedia ferroviaria de Once en 2012, reclamó hoy al Gobierno que “trabaje para prevenir” accidentes ferroviarios a fin de “no volver a llorar muertos y heridos”.
A 20 meses del accidente que dejó en Once un total de 51 muertos y más de 700 heridos, y tres días después de un nuevo siniestro en esa terminal, que causó 99 lesionados, Menghini afirmó que “toda la estructura está colapsada" y "debe trabajarse en todos los estamentos", al tiempo que sentenció: "La responsabilidad del Estado es ineludible”.
“Hay que trabajar para prevenir y no volver a llorar muertos y heridos”, instó.
Durante una ceremonia en la estación de Once que comenzó con el sonar de una sirena, los familiares denunciaron la “desprotección” de los usuarios del sistema.
En un nuevo aniversario de la mayor tragedia ferroviaria del país de los últimos 35 años, los familiares de las víctimas leyeron un documento en el que ratificaron su “lucha para que nadie más sea víctima de una tragedia previsible”.
Por su parte, la madre de Lucas Menghini, María Luján Rey apuntó también contra el Gobierno por el nuevo accidente del sábado, al sostener que “los funcionarios nacionales son expertos en desligarse de las responsabilidades”.
“El ministro (del Interior y Transporte, Florencio) Randazzo, cuando descarga toda la responsabilidad del choque del sábado último en el motorman, se olvida de que ese maquinista pertenece a su área”, dijo Rey en diálogo con DyN en la terminal ferroviaria de Once.
FUENTES: Agencias Buenos Aires