En plena discusión del Presupuesto 2026 y el pedido de financiamiento del gobierno de Axel Kicillof, se dio a conocer un proyecto para crear una Comisión Bicameral de Seguimiento de la Deuda, un gesto que provoca lecturas diversas.
Esta semana, el oficialismo peronista impuso su mayoría para conseguir el dictamen en dos de las tres iniciativas enviadas por el Ejecutivo: el Presupuesto y la “Fiscal-impositiva”.
De ser aprobada la iniciativa del oficialismo, habilitaría a la gobernación a tomar deuda por u$s 3000 millones pero fue dejada de lado y quedó en el tintero para ser tratada en la próxima reunión. El kicillofismo comenzó a sospechar maniobras para dejar al gobernador sin esa herramienta que se considera clave para mantener la estabilidad macroeconómica.
La explicación oficial -del peronismo que no responde al mandatario- fue que el financiamiento necesita del voto de dos terceras partes en ambas cámaras y que se necesita llegar al hemiciclo con los acuerdos atados.
En cambio, cerca del sucesor de Dardo Rocha recriminaron a sus “compañeros” por no haber firmado el despacho: “Como no vamos a tener dictamen si somos mayoría en la Comisión. Con dictamen marcabas la cancha, la negociación con la oposición seguía hasta la sesión”, señalaron fuentes cercanas al gobernador.
En las últimas horas, por otro lado, el bloque Unión y Libertad, de los libertarios disidentes -tanto en Diputados como en Senado- presentó una iniciativa que busca institucionalizar un organismo permanente, una comisión bicameral que pueda seguir la toma de deuda y su real gasto.
El proyecto fue presentado por el diputado Martín Rozas y los senadores Carlos Kikuchi, Sergio Vargas y Silvana Ventura, todos del espacio Unión y Libertad. A ese espacio, de origen libertario, se lo considera como uno de los que estaría dispuesto a acompañar los proyectos.
“Se busca encontrar alguna alternativa para llegar a dejar a todas las partes conformes”, explicaron fuentes parlamentarias en diálogo con El Cronista.
Para quienes conocen la dinámica legislativa, el proyecto podría acercar a los diputados y senadores de la Coalición Cívica, de la UCR y del PRO, pero especialmente “a los dos bloques de Libertarios Blue”, la denominación de aquellos que no están dentro del espacio de La Libertad Avanza.
Esto llega cuando la oposición de UCR y PRO condiciona su apoyo al endeudamiento con reclamos que incluyen cargos en la Suprema Corte de Justicia, la composición del directorio del Banco Provincia y, en nombre de los intendentes, fondos atados a la deuda y la condonación de deudas.
En el kicillofismo, hoy en minoría absoluta, comienza a crecer el miedo del estancamiento de la iniciativa, tal como sucedió el año pasado. La herramienta que propone la oposición es vista como una nueva posible dilación. El apuro por conseguir dictamen esta semana era, en algún sentido, para bloquear la apertura de nuevas condiciones opositoras.
Control de deuda: qué dice el proyecto de la oposición a Kicillof
El proyecto crea una Comisión Bicameral encargada de analizar cualquier pedido de endeudamiento que el Ejecutivo envíe a la Legislatura.
Podrá emitir observaciones, sugerencias y dictámenes, además de elaborar informes trimestrales y un reporte anual sobre el uso, evolución y pago de la deuda.
Del mismo modo, en caso de prosperar, el Ejecutivo deberá entregar información detallada sobre montos, condiciones, contratos, tasas y plazos.
Además, el texto del proyecto impulsado por Unión y Libertad prevé que la comisión estará formada por seis senadores y seis diputados, con representación proporcional de todas las fuerzas políticas.