El Gobierno dio a conocer ayer el último borrador de la Ley Bases al enviarlo a los jefes de bloque legislativos y gobernadores de todo el país, quienes también recibieron como documento aparte el proyecto de ley de Medidas Fiscales, que contempla la modificación del piso de Ganancias. El oficialismo se optimista y espera que haya media sanción para fin de mes, pero reconocen que hay artículos que todavía resta la revisión de los opositores para asegurar la aprobación segmentos que no tenían consenso.
El nuevo documento del megaproyecto de ley consta de 182 páginas, con 279 artículos y dos anexos (que detallan las empresas puestas a privatización). Hasta ayer a la noche, el último en revisar la letra chica era el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que posteriormente se lo giró a los bloques dialoguistas con los que el Gobierno había mantenido audiencias en la última semana.
En esos encuentros se acercaron posiciones al respecto de Ganancias (hubo una modificación del piso y las alícuotas que dejó satisfecho a un segmento importante de los gobernadores, aunque no a los mandatarios patagónicos). Los nuevos pisos serán de $ 1.800.000 para trabajadores individuales y $ 2.300.000 de salario bruto para casados con dos hijos.
También se consensuaron cuestiones clave como la reforma laboral. Este lunes el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro del Interior, Guillermo Francos, le ofrecieron a los radicales que sean ellos quienes inserten en comisiones ese articulado con modificaciones consensuadas para que pueda aprobarse en el recinto: está confirmado que se quitará el artículo de las cuotas solidarias, aunque no el que diluye la ultraactividad de los convenios y las multas por irregularidad de contratación.
Resultará clave la reunión que Francos mantenga hoy con los principales representantes de la mesa ejecutiva de la CGT. Antes de ello, los sindicalistas se reunirán en la sede de Azopardo con senadores de Unión por la Patria.
Dado que la Ley Bases debatida en febrero volvió a comisiones el oficialismo no deberá presentar el nuevo texto por la mesa de entradas de la cámara baja. Esto acelerará los tiempos del debate, que se espera que inicie la semana próxima y en el que seguramente pasarán algunos ministros que tengan vinculación con algunos de los artículos que abarca el megaproyecto de Ley.
Luego de la ronda de consultas con los gobernadores y los diputados aliados en la Casa Rosada creen que el nuevo proyecto de Ley Bases tendrá suficientes votos para ser aprobado y girarlo al Senado en mayo. El ministro Francos dialogó brevemente con El Cronista y dijo: "Se trata de un proyecto con mucho consenso y hemos avanzado en el diálogo con diferentes sectores. Confiamos en que será aprobado con mayorías".
La decisión del gobierno es que haya un tratamiento rápido de la iniciativa para que se apruebe luego en el Senado en mayo y sea sancionada antes del 25 de ese mes. Esas es la fecha límite que se impuso la Casa Rosada por la convocatoria al Pacto de Mayo que citó Milei a todos los gobernadores.
Este acuerdo contiene diez puntos referidos a metas de largo plazo y el oficialismo se mantiene renuente ante la posibilidad de insertar sugerencias de parte de los gobernadores. En particular, casi la totalidad de las provincias ve con buenos ojos que este documento tenga una cláusula que abarque el tema de la educación, pero desde Balcarce 50 dijeron que son "intocables".
Los artículos que serán revisados
Los responsables parlamentarios de los principales bloques marcaron que se tomarán unos días para determinar las posiciones sobre los 279 artículos que componen el nuevo documento.
Mientras que el PRO manifestó su apoyo unánime al oficialismo, todavía hay puntos que deben ser revisados por los bloques de la Unión Cívica Radical (UCR) y de Hacemos Coalición Federal (HCF), que por la cantidad de bancas que contienen condicionan la aprobación o no de los artículos.
Un ejemplo de ello era el Artículo 71 del primer borrador enviado un mes atrás, que faculta al Poder Ejecutivo Nacional a poder derogar o modificar regulaciones sobre la actividad económica privada en diferentes casos. En el nuevo documento, el Gobierno explicitó casos particulares en donde se puede aplicar estas derogaciones. "Es muy similar al que se aprobó en la emergencia del 2002", dice un alto funcionario del Gobierno, que espera que sea aprobado.
También hay diferencias referidas a cuestiones provinciales específicas y del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), uno de los segmentos más significativos para el Gobierno, y sobre las privatizaciones: los radicales se oponen que las empresas se encuentren agrupadas en bloque y no se puedan votar de manera individual.
La propuesta de derogación de la Ley N° 27.705 de moratoria previsional fue uno de los artículos más repudiados por el bloque de Unión por la Patria (UxP). "Milei pretende derogar la moratoria por la que millones de personas pueden acceder a una jubilación. Política de crueldad", alegó el diputado Itai Hagman.
Entre los capítulos que no pasaron el filtro de las negociaciones con la oposición están los 10 artículos que componían el apartado tabacalero, que, entre otras cuestiones, proponía que todas las empresas del sector paguen los mismos impuestos.