El sector privado que sostiene el enorme gasto público, ahora necesita el apoyo del Estado para poder sobrevivir en esta coyuntura imprevista, inimaginable y con consecuencias impredecibles hasta la fecha por el coronavirus.
Para esta coyuntura, las medidas que se proponen pueden sintetizarse en los siguientes puntos:
1 - La postergación de todos los vencimientos impositivos y previsionales de la Nación, Provincias y Municipios hasta el 31 de julio de este año, con condonación de intereses y sanciones.
2 - Ampliación del alcance de la actual moratoria a todos los contribuyentes (no solo para las pymes), extendiendo el plazo a las deudas vencidas al 31 de marzo próximo.
3 - Suspensión de las fiscalizaciones presenciales hasta el 30 de septiembre de 2020, solamente podrán ser efectuadas de manera remota.
4 - Ampliar el alcance de la repatriación de activos en el exterior a los efectos del impuesto sobre los Bienes Personales para ser destinados a la adquisición de inmuebles, de bienes de uso o donaciones a la Cruz Roja destinadas a equipamiento sanitario (respiradores , medicamentos, tecnología).
5 - Deducción especial en el Impuesto a las Ganancias de los sueldos totales abonados, equivalentes a:
a) 300% para empresas que mantienen la nómina salarial
b) 200% para empresas que reducen solo el 10% de la nómina
c) 100% para empresas que reducen solo el 20% de la nómina
6 - Permitir la deducción de las donaciones sin tope destinadas a fines sanitarios, hospitalarios, comedores y victimas del coronavirus.
7 - Establecer la amortización acelerada en el Impuesto a las Ganancias de los bienes del activo fijo, en un solo ejercicio (excepto los automóviles).
8 - Aumento del mínimo no imponible de las contribuciones patronales, hasta $30.000 por cada trabajador.
9 - Permitir el cómputo del 100% del ajuste por inflación en un solo ejercicio fiscal.
10 - Aumento del mínimo no imponible de Ganancias para trabajadores solteros a $ 80.000, y para los casados con dos hijos a $100 mil. Equiparación de las deducciones personales con los autónomos.
Sin dudas, estas propuestas tienen un alto costo fiscal, pero a mi modo de ver, es un mal menor respecto de una abrupta caída de la actividad económica, aumento del desempleo y disminución del consumo. Es necesario cuidar a los contribuyentes que financian al Estado.