Cristina Kirchner volvió a publicar una carta en su sitio web y generó revuelo político. Como en reiteradas ocasiones, la expresidenta apuntó a la Justicia: recordó sus causas judiciales y las "persecución" que se inició en 2016. En este caso con un contenido extra, ya que el gobierno nacional había mostrado nuevamente sus intenciones de modificar la ley del Ministerio Público Fiscal para nombrar a un nuevo procurador.

En la carta, Cristina recuerda que fue citada a indagatoria "justo el día del cumpleaños de Néstor" y "a prestar ocho declaraciones indagatorias en un mismo día. Una vez más, la violación de las más elementales normas y principios del Estado de Derecho estuvo a cargo de Bonadio".

También puso sobre la mesa a su hija Florencia, quien "jamás fue funcionaria" y "se vio obligada a presentar una eximición de prisión ante los crecientes rumores de una posible orden de detención por parte del juez sicario, Bonadio".

Según su visión, desde 2016, "durante el gobierno macrista, se desató en Argentina una inédita persecución judicial en tiempos de democracia, con ribetes de cacería en algunos casos". Criticó en este punto las prisiones preventivas y sostuvo que se utilizaban "para encarcelar opositores".

La vicepresidenta agrega que a pesar de que los dirigentes eran perseguidos injustamente, según su apreciación, nunca se negaron a ponerse a disposición de la Justicia. En este punto, lo comparó con el accionar de un ex funcionario del gobierno anterior.

Contó que "anoche, la pantalla del televisor me devolvía la imagen de la cara de Fabián Rodríguez Simón, alias 'Pepín', integrante de la ya célebre y mediática Mesa Judicial macrista, junto a un título de pedido de 'asilo político' en Uruguay porque se sentía 'perseguido'".

La vicepresidenta calificó a Rodríguez Simón como "apretador serial de jueces y empresarios", y criticó a quienes consideran que son ellos quienes buscan la impunidad, crítica frecuente que se esgrime desde la oposición.

También cruzó a Juntos por el Cambio por haber armado "una causa judicial contra la entonces procuradora Alejandra Gils Carbó", lo que la llevó a renunciar a pesar de haber tenido acuerdo del Senado para su nombramiento.

En este sentido, recriminó que la oposición busque "prolongar una situación institucional que nunca tuvo lugar en la democracia argentina", en referencia al interinato de Eduardo Casal como procurador interino, que se extiende desde 2017. También lo criticó por haber sido designado fiscal "sin concurso en el año 1992, durante el menemismo".

Finalmente, Cristina asegura haber sentido "estupor e indignación" por las imágenes de Rodríguez Simón mencionadas. Y lanzó una arremetida más contra sus adversarios políticos, al considerar que siente "la íntima convicción de que finalmente, más tarde o más temprano, las máscaras caen y aparece el verdadero rostro del macrismo: mentira, cinismo y la verdadera impunidad en Argentina, la de ellos".