El embajador de Brasil en Buenos Aires, Julio Glinternick Bitelli, es un diplomático hiperactivo. En las últimas semanas se reunió con asesores de los principales candidatos presidenciales, con Alberto Fernández y empresarios. A todos les envió el mismo mensaje: "Dejé en claro que la prioridad para Brasil no cambia por las elecciones. Sea cual sea la decisión en las urnas la relación de Argentina con Brasil se va a mantener en un nivel prioritario".
Bitelli estuvo con referentes de Sergio Massa, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich. Hubo encuentros reservados y en la síntesis que expuso ante El Cronista de esas charlas el embajador de Brasil resaltó el pedido que transmitió el presidente Lula Da Silva. "Hay una decisión muy clara del presidente Lula de que la Argentina vuelva a ser un eje central de nuestra política exterior", dijo.
También en la entrevista con este medio el embajador Bitelli remarcó que lo que hoy preocupa en Brasil es que de los u$s 40.000 millones que había de balanza comercial hace 10 años bajaron a u$s 28.000 millones. "Hay que volver a los niveles históricos", instó.
Bitelli habló del Mercosur y las posiciones encontradas internamente. Y detalló los reclamos de las empresas de Brasil por "retrasos, ciertas dificultades en las importaciones y las necesidades urgentes de Argentina" bajo un pedido puntual: "Creemos que se pueden flexibilizar las restricciones y que eso será algo positivo para el comercio bilateral".
-¿Cuál es la misión o el mandato que le dio el presidente Lula Da Silva para su gestión diplomática en Buenos Aires?
-La misión es muy clara: reconstruir la relación que se vio afectada en los últimos años. Y volver a la centralidad de Brasil en Argentina. Hay una decisión muy clara del presidente Lula de que la Argentina vuelva a ser un eje central de nuestra política exterior. Esto lo dejó en claro cuando vino en enero a Buenos Aires. La idea es entonces reconstruir la relación y volver a la centralidad que nunca debió dejarse de lado.
-Pero Lula dijo hace unos días que le gustaría que gane un candidato de la inclusión y todos entendieron que le daba un guiño a Massa...
-La verdad es que el Presidente Lula tiene con el Presidente Alberto Fernández una larga amistad. Eso es indudable. Pero sus declaraciones son más bien que gane la democracia y que gane un candidato que tenga presencia en las necesidades sociales de la Argentina. Pero no dio nombres. Incluso cuando lo presionaron para dar un nombre no lo hizo. No hay un nombre específico detrás de esas declaraciones.
-¿Es decir que para Brasil no cambiaría el panorama si gana alguien de Juntos por el Cambio?
-Yo he hablado con gente de Horacio (Rodríguez Larreta) y de Patricia (Bullrich) que me pidieron una reunión. Allí dejé en claro que la prioridad para Brasil no cambia por las elecciones. Lo más importante para Brasil es la relación entre los Estados. Estoy seguro de que la decisión de las elecciones por supuesto está en manos de los argentinos y sea cual sea esa decisión la relación con Brasil se va a mantener en un nivel prioritario.
-¿Cree que incluso va a fortalecerse esa relación?
-Sin dudas va a fortalecerse la relación entre Brasil y Argentina. Lo importante es que hay una reconfiguración del orden internacional. Y tanto en Argentina como en Brasil hay una decisión de volver a un proceso de integración regional que empieza con una relación más estrecha entre Brasil y Argentina, pasa por el Mercosur y después por Sudamérica y América latina. Es un momento de coyuntura mundial donde las grandes regiones ganan en importancia. África es un continente que se mira de manera estratégica y Sudamérica no puede quedarse atrás. Es volver a un proceso de integración y Argentina y Brasil es el núcleo duro de esa integración. Hay que discutir una vez más un estrechamiento de las relaciones entre ambos países. La relación energética es importantísima. Vaca Muerta va a tener un rol importante en este proceso. Veo a Brasil y Argentina caminando juntos cada vez más.
-¿No cree que hay riesgos de ruptura en el Mercosur por la decisión de Uruguay de acordar unilateralmente con China?
-Es un punto particular de Uruguay. Pero dentro del Mercosur la idea es tener intereses de Uruguay y de todos los miembros dentro del Mercosur. Eso se hace con un diálogo franco con Uruguay. Hay posiciones internas diferentes pero nada irreconciliable. Se sigue con el diálogo interno en el Mercosur para que los cuatro países avancen en acuerdos con China o con otros países. Uno no tiene condiciones de predecir el futuro, pero no creo que las diferencias de visión sean tan fuertes como para romper la estructura de un patrimonio tan relevante como el Mercosur.
-La balanza comercial entre Brasil y Argentina sigue siendo deficitaria para nuestro país. ¿Como se puede revertir o equilibrar esto?
-Realmente el tema la balanza comercial es más que matemático. Lo que hay que tener es más comercio. Lo que me preocupa es que de los u$s 40.000 millones de dólares que teníamos hace 10 años hemos bajado a u$s 28.000 millones. Hay que volver a los niveles históricos.
-¿Por qué bajó tanto?
-Por una serie de cosas. Cuestiones relacionadas con importaciones, trabas, el financiamiento de China. Pero el comercio bilateral entre Argentina y Brasil sigue teniendo un valor agregado muy alto lo que lo diferencia de la relación que tenemos con otros socios. Hay que seguir trabajando. Y como decía la cuestión energética puede tener un peso muy importante en esto. La posibilidad de que con vaca Muerta la posibilidad de que Brasil compre gas a la Argentina será muy relevante para la balanza comercial.
-¿Los empresarios de Brasil se siguen quejando por las trabas a las importaciones que impone la Argentina y las dificultades para girar dividendos?
-Eso es un hecho. Hay reclamos de las empresas de Brasil por retrasos, ciertas dificultades en las importaciones. Entonces tratamos de tener un diálogo muy fluido con la Secretaría de Comercio y los responsables aquí de eso. Entendemos las necesidades urgentes de Argentina pero creemos que se pueden flexibilizar esas restricciones y creemos que eso será algo positivo para el comercio bilateral. Para los dos países porque de verdad eso implica también dificultades para importadores argentinos que necesitan de esos productos para ellos.
-¿Que deudas pendientes hay de la relación bilateral?
-Ese es un tema que hay que trabajar con cuidado a partir de la idea de que la relación entre Argentina y Brasil es diferente. Si de verdad creemos que es una relación especial hay que darle un tratamiento especial a las dificultades. Esas dificultades naturales en una relación tan intensa como lo son entre nuestros países. Hay dificultades pero hay que trabajarlas con canales de diálogo para minimizar esas dificultades.
-¿Hay posibilidad de que Argentina sea incorporada a los BRICS?
-El presidente Lula dijo que Argentina tiene el apoyo de Brasil si quiere ingresar a los BRICS. Ahora la discusión sobre la ampliación de los BRICS es algo que viene ocurriendo a nivel técnico entre los miembros de ese bloque. Si Argentina quiere ingresar tiene el apoyo de Brasil. Pero la ampliación es una decisión que se define por consenso.
-¿Brasil va a dar el apoyo a Argentina en la próxima cumbre de Sudáfrica?
-Eso se define por consenso. Se está trabajando a nivel técnico por la inclusión de nuevos miembros. Veremos cómo se define eso.
-Usted habló de integración energética, ¿cómo está el acuerdo por apoyo financiero para el gasoducto que iría a Brasil desde Argentina?
-Había problemas legales que se solucionaron. Ahora Argentina debe presentar un proyecto detallado para analizar el financiamiento del gasoducto. Pero lo más importante que todos los inconvenientes se superaron. Ahora hay que evaluar el proyecto para que se pueda financiar desde Brasil el próximo tramo del gasoducto. En septiembre se abre la licitación del segundo tramo y esperemos que Brasil esté presente en esa licitación.
-¿Hay posibilidad de avanzar en el acuerdo de venta de los equipos de militares para Argentina?
-Es un tema complejo pero hay decisión de Brasil de avanzar en este sentido. La información de que se había abandonado el proyecto no es verdad. Todo dependerá de las garantías para el financiamiento. Pero hay decisión de avanzar en eso.
-Para cerrar, ¿qué pasa si hay una buena elección de Milei?
-Lo más importante es que las elecciones son de los argentinos. Pero algunos de los temas planteados por ese candidato no ayudarían en nada a la integración regional y bilateral.
-¿Es parecido a Bolsonaro?
-Esas comparaciones son simplificadoras. Pero cada uno puede hacer las comparaciones que crean.
-En relación a la lucha contra el narcotráfico, ¿cómo sigue?
-Ese plan va a seguir. Seguiremos en el trabajo conjunto. No puede haber temas tabúes entre ambos países. Creo que si lo hacemos juntos es mejor. Este es un tema de la agenda bilateral y parte de la reconstrucción de una relación amplia y sincera.
-¿Es un tema tabú el de la lucha contra el narcotráfico con incorporación de militares?
-Esa es una definición interna de cada país respecto de las fuerzas que intervienen. Lo importante es mantener los canales abiertos de diálogo y la idea de que este es un problema que debemos abordar juntos.