El presidente Mauricio Macri inauguró oficialmente las sesiones ordinarias del Congreso ante la Asamblea Legislativa. El mandatario puso en evidencia un cambio en el tono de sus palabras. Con un discurso más combativo que en años anteriores, comenzó la campaña en un claro contrapunto contra el kirchnerismo.
Macri tenía hoy que pronunciar su discurso en miras de una próxima elección presidencial en medio de un contexto de crisis e incremento continuo de inflación. Para eso, en su alocución fue hacia los lugares comunes que suele tomar para constituirse como el capitán de barco perfecto para las “tormentas que nos toca transitar.
En año eleccionario, no hizo grande anuncios. El más importante fue cuando habló de la pobreza. Por un lado concedió que se incrementó, pero por el otro informó sobre el 46% de aumento este mes en la Asignación Universal por Hijo.
Una de sus frases más repetidas fue la de “cambiar nuestro país en serio y “dejar de patear nuestros problemas para adelante .
El lugar del "honesto"
Macri suele usar el tema de la crisis, a la que designa como tormenta, para construirse como el presidente más idóneo para llevar el país adelante. Su estandarte es “la verdad , aceptar y nombrar la crisis lo ubica en el lugar del honesto que dice la verdad por más dura que esta sea. Establece aquí un contrapunto con el kirchnerismo con esta cuestión de 'estamos mal, lo reconozco, pero no construimos ficciones sino que encaramos los problemas y no los ocultamos'. Menciona en más de una ocasión al Indec y los ocultamientos propuestos por el kirchnerismo como: “Nosotros sabemos que la inseguridad no es una sensación .
El presidente argentino quiere ubicar a su gobierno en medio de una gran crisis histórica del país y no se limita a declarar que esto es solo el producto de la “herencia recibida sino que se trata de “los atajos que marcaron a la historia argentina . Acude a este lugar común para solicitar paciencia. Ata al auditorio a la pregunta casi retórica de cómo no otorgarle más tiempo a alguien que plantea estar combatiendo los grandes problemas históricos. Este recurso es el único que tiene Macri y él lo sabe. Entiende perfectamente que no hay candidatos definidos a la vista pero al mismo tiempo sabe que el kirchnerismo, o al menos sus resabios, están al acecho en un momento en el que el Gobierno desciende en las encuestas en medio de una crisis creciente y en una constante escalada inflacionaria.
Macri retoma esa idea muy utilizada por Cristina Kirchner del “ellos o nosotros al plantear que hay estructuras oxidadas y arraigadas del pasado. No se mete contra el votante opositor, no lo ataca y esto le juega a favor, solo se limita a señalar las grandes diferencias de "un yo presidente" y su gobierno del cambio, que se desdibuja bajo "un nosotros los argentinos", versus "un ellos" que ocultan los datos del Indec o atentan contra la democracia.“Ya no aceptamos que nos oculten datos relevantes o que pongan en jaque la institucionalidad de nuestra democracia .
Los mensajes de la gente
Quizás uno de los recursos más llamativos fue el usar los mensajes de la gente, en este caso no mencionó su nombre sino que lo llamó un mensaje de una ciudadana. “Quería contarles que este año con mi esposo no nos fuimos de vacaciones pero conectamos las cloacas e instalamos el agua corriente . Esa es la técnica discursiva de Macri, intercalar un sacrificio con un logro que atribuye a su gobierno y que al mismo tiempo no cumplió el gobierno anterior, y si se trata de algo vinculado a la obra pública, tanto mejor.
Se puede tratar de una tormenta o de un “pantano como en el día de hoy pero Macri se encarga de decir que estamos mejor
Uno de los momentos más pasionales del discurso fue cuando mencionó el Decreto de Necesidad y Urgencia de Extinción de Dominio. Aquí claramente trata de asociar al gobierno kirchnerista con el narcotráfico y la corrupción: “Queremos recuperar los bienes de las mafias el narcotráfico y la corrupción “Se está acabando la impunidad, estamos mejor que en 2015".
Hace un listado de logros de su gobierno que abarcan temas coyunturales como el debate sobre el aborto o el trato hacia la mujer. Se constituye como diferente al gobierno anterior en casi todos los temas como la pluralidad de voces, en la multiplicidad de conferencias de prensa y la gran cantidad de informes presentados ante el Senado.
Oficialismo o barbarie
Macri va a retomar el slogan de su campaña anterior y va a jugar con la idea repetida de “Cambios para no volver atrás nunca más (mientras la oposición reconocida del kirchnerismo con cartelitos promueve un hashtag para las redes sociales de #Hay otro camino).
Un poco lo que busca Macri cuando es interrumpido, abucheado o insultado es asociar a esa oposición con la barbarie: "Los insultos hablan más de ustedes que de mí, señores, yo estoy acá por el voto de la gente". Una suerte de 'ellos los violentos de siempre, yo el democrático elegido por la gente'.
Aprovechando la crisis actual en Venezuela y los debates sobre la democracia en ese país, Macri alude negativamente a esta cuestión y la relación del gobierno anterior y su distinción a Nicolás Maduro. No quedó afuera tampoco la obvia alusión al Pacto con Irán: “En 2015 también se negociaba la impunidad con el régimen iraní sobre heridas abiertas en los atentados terroristas más graves de nuestra historia. Se construían enemigos ficticios, apelando a un nacionalismo cobarde que evitaba hacernos cargos de los problemas domésticos",
Se cambia en serio cuando
Uno de los slogans posible para la campaña de reelección de Mauricio Macri bien podría ser: “Se cambia en serio cuando , tuvo un uso repetido a lo largo del discurso. Una de las frases más sobresalientes fue cuando pronunció: “Se cambia en serio cuando se termina el clientelismo y el uso político de los pobres, la denigrante costumbre de pedirles que vayan a marchar o a votar a cambio de un favor . Un golpe directo a las prácticas del kirchnerismo.
Macri apeló a los argentinos en su vehemente arenga e hizo un llamado a “no aflojar en un claro reconocimiento de la crisis.
“El tiempo es hoy, nuestro tiempo es hoy. No dejemos que los predicadores de la resignación y el miedo le ganen a la esperanza . Aquí hay una obvia alusión a los discursos fatalistas de Cristina, quien no estuvo en el Congreso para la Asamblea Legislativa.
Casi la totalidad del discurso fue leído y en reiteradas oportunidades Macri falló en la articulación de las palabras. Leía su discurso sin entender las situaciónes reinantes en el salón, y seguía leyendo ante las interrupciones de Gabriela Miccheti.
Para finalizar un presidente totalmente exultante terminó su discurso con un tono de arenga futbolística en períodos de pasión mundialista con el: “Vamos argentinos,vamos con fuerza, vamos en serio,vamos con coraje, vamos con pasión. Este es nuestro país y juntos lo vamos a sacar adelante. ¡Vamos Argentina! ¡Vamos Argentina! ¡Vamos Argentina!"
En este sencillo acto quedó inaugurada la batalla política para las próximas elecciones y Macri, que quiere ser reelecto, ya avisó que este es el último discurso de ESTE mandato. Veremos cómo seguirá esta historia muy pronto. Entre mayo y junio se definirán todos los candidatos.