La inflación de Estados Unidos alcanzó el 6,4% interanual en enero y acumuló su séptimo mes consecutivo en baja, de acuerdo a los datos revelados desde la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo estadounidense. De esta forma, el Índice de Precios de Consumo (IPC) de los últimos doce meses se ubicó una décima por debajo del dato de diciembre, cuando llegó al 6,5%, pero dos décimas por encima de las previsiones de los analistas, que proyectaban un 6,2%. Ahora los analistas creen que la Reserva Federal deberá seguir aumentando gradualmente las tasas de interés para vencer a la inflación "Debemos seguir preparados para continuar elevando las tasas por un periodo más largo de lo anticipado, si esa vía es necesaria para responder a cambios en el panorama económico o para compensar cualquier relajamiento indeseado en las condiciones", dijo la presidenta de la Fed de Dallas, Lorie Logan, en un discurso en la Universidad Prairie View A&M, en Texas, según la agencia Reuters. Mientras tanto, en Argentina, la inflación fue de 6%. Es decir, la Argentina tiene la inflación en un mes que Estados Unidos tiene en un año. Los precios en enero tuvieron una aceleración de 0,9 puntos porcentuales con relación al 5,1% de diciembre pasado y una variación interanual del 98,8%, según informó el INDEC. Pese a la pauta de Precios Justos del 4% para enero, Alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó 6,8% en el mes, 0,8 puntos porcentuales por encima del índice general y ese rubro fue lo que más incidió en todas las regiones. Al interior de la división se destacó la suba de los precios estacionales de Frutas y verduras, Tubérculos y legumbres. A su vez, aunque con menor alza que los anteriores, sobresalió la incidencia de Pan y cereales y Carnes y derivados, dijo NA. La pregunta es qué hubiese sido de la inflación si no estaban los acuerdos de precios. No son países comparables Argentina y Estados Unidos, es cierto. Pero lo que también es cierto es que la inflación cuando es tan alta pasa de ser un problema solo económico para convertirse en un problema político. La oposición está cómoda con la inflación que presenta el Indec. Pero debería estar preocupada. La Argentina hace años que lidia con precios altos. Enfriar la economía no necesariamente se puede convertir en una solución. Tasas cada día más altas también son un riesgo. La Argentina necesita mantener un ritmo de crecimiento y para eso necesita dólares, entre otras cosas.