El Gobierno colombiano avanza con una nueva fase de control fiscal que contempla el embargo de cuentas bancarias y tarjetas de crédito pertenecientes a ciudadanos que aparezcan en el listado actualizado de deudores morosos de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN).

La medida busca reforzar la lucha contra la evasión y garantizar el cumplimiento de las obligaciones tributarias en todo el territorio nacional.

Esta estrategia, implementada en conjunto con bancos y cooperativas financieras, autoriza la suspensión inmediata de productos financieros una vez confirmada la inclusión del contribuyente en la base de datos oficial de incumplidos.

¿Cómo serán los embargos y bloqueos de cuentas bancarias y tarjetas de crédito?

De acuerdo con la DIAN, el proceso de embargo y suspensión se realizará de manera escalonada y bajo supervisión directa de las autoridades tributarias. La prioridad estará en los contribuyentes que no respondieron a los llamados previos para normalizar su situación fiscal o que mantienen deudas activas superiores a los montos definidos por la entidad.

Las medidas incluyen:

  • Bloqueo total de cuentas bancarias, sin posibilidad de hacer retiros, pagos o transferencias.
  • Congelamiento de tarjetas de crédito, tanto físicas como digitales.
  • Retención de fondos disponibles hasta cubrir los valores adeudados.

Fuentes del sector financiero confirmaron que los bancos recibieron la instrucción de ejecutar los bloqueos de inmediato una vez verificada la identidad del deudor.

Quiénes aparecen en la lista de cuentas bancarias embargadas por la DIAN

La lista de morosos publicada por la DIAN incluye tanto personas naturales como jurídicas con procesos tributarios abiertos o con deudas pendientes de pago desde hace más de seis meses.

Además, se agregaron contribuyentes que omitieron la presentación de declaraciones pese a las notificaciones oficiales enviadas durante el año.

Entre los perfiles más afectados se encuentran:

  • Empresarios con obligaciones fiscales vencidas.
  • Personas naturales con impuestos de renta o IVA pendientes.
  • Usuarios que mantuvieron cuentas inactivas utilizadas para movimientos irregulares.

Los nombres de los contribuyentes embargados pueden ser consultados directamente a través del portal oficial de la DIAN, en la sección de procesos administrativos de cobro.

Razones del embargo de cuentas y suspensión de tarjetas de crédito

El Gobierno explicó que el objetivo principal es cerrar el cerco financiero sobre los evasores y fortalecer la cultura tributaria en Colombia. Según la entidad, la evasión de impuestos genera pérdidas millonarias que afectan la inversión pública y los programas sociales del Estado.

Las principales causas que justifican los embargos son:

  • Deudas tributarias no saldadas ante la DIAN.
  • Procesos judiciales o administrativos por incumplimiento financiero.
  • Uso indebido o inactividad prolongada de cuentas bancarias.
  • Reincidencia en la evasión o falsificación de información tributaria.

La suspensión de productos financieros forma parte de un plan integral de la DIAN para depurar el sistema y garantizar la transparencia en las operaciones económicas.

Cómo evitar que tu cuenta bancaria sea embargada en noviembre

Las autoridades recomiendan a los ciudadanos verificar periódicamente su estado tributario y atender cualquier notificación emitida por la DIAN o por su entidad bancaria. Entre las acciones preventivas se destacan:

En caso de recibir un aviso de suspensión o embargo, se sugiere acudir de inmediato a la entidad financiera o solicitar asesoría legal para resolver el proceso antes de que se ejecuten las sanciones.

Qué hacer si ya embargaron tu cuenta o congelaron tu tarjeta

Si un ciudadano fue notificado de la medida, puede solicitar una revisión administrativa del proceso o gestionar un acuerdo de pago para recuperar el acceso a sus fondos. Una vez se compruebe el cumplimiento de la obligación tributaria, el banco podrá levantar el embargo y restablecer los servicios financieros.

El Gobierno enfatizó que estas acciones no buscan castigar, sino fomentar la responsabilidad fiscal y garantizar que los recursos públicos se recauden de manera justa y eficiente.