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La Corona Británica transita momentos de cambio y conmoción en el seno de la familia real: luego del cáncer del rey Carlos III, los focos están puestos en las acciones que llevan a cabo cada uno de los integrantes de la realeza. En este marco, se conoció la noticia de que un familiar abandonóelpaís y ya no está en los planes del Palacio de Buckingham.
Recientemente se han filtrado videos en redes sociales que muestran a la duquesa de York, Sarah Ferguson, de viaje por Perú, en Latinoamérica. Según se puede ver en las imágenes, la ex integrante de la realeza visitó una de las universidades nacionales de ese país y se mostró sorprendida por las instalaciones.
La duquesa de York actualmente se encuentra separada del príncipe Andrés y, por ende, de la Corona Británica, aunque mantiene un lazo especial ya que sus hijas, Beatriz de York y Eugenia de York, sí forman parte de la familia real y ofician día a día como miembros activos.
Llora la Corona Británica: el miembro que ya no forma parte de la realeza
Sarah Ferguson fue reconocida históricamente por ser una gran amiga deLady Di. Estuvo 10 años casada con el príncipe Andrés, pero en la década de los 90 tomaron la decisión de separarse y prosiguieron con el divorcio, lo que generó conmoción en la opinión pública de la Corona Británica.
Si bien nunca se dio a conocer el motivo real que llevó a la separación del príncipe y la duquesa, en 1992 se reflotó la teoría de una posible infidelidad, luego de que se publicaran fotos de Ferguson muy cercana a quien en ese entonces oficiaba como su asesor financiero, John Bryan.
Corona Británica: ¿qué papel desempeña actualmente la duquesa de York en los eventos de la realeza?
Se puede decir que, actualmente, la duquesa de York Sarah Ferguson mantiene una posición "semi apartada" en los eventos de la Corona Británica, sobre todo en el que sus hijas tienen algún tipo de participación. Es por este motivo que, en ciertas ocasiones, sí participa de un acto real.
Ha sido vista en reiteradas ocasiones en celebraciones privadas o eventos puntuales, como funerales o bodas reales, aunque los expertos aseguran que su imagen no representa formalmente a la Corona Británica.
