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La corona británica se encuentra en crisis: tras la enfermedad cada vez más agravada del rey Carlos III, la prensa internacional dio a conocer un oscuro apodo con el que el PríncipeGuillermo llama a su hermano Harry: "Es brutal".
La familia real ha enfrentado una serie de desafíos en la última semana. La corona británica se ve conmocionada después del agravamiento del cáncer del monarca Carlos, quien tuvo que reducir las actividades al frente del Reino Unido. Desde ese entonces, cientos de rumores se han expandido sobre cómo seguirá la realeza.
La reina Camila, por su parte, también ha estado lidiando con una infección pulmonar que ha generado preocupación por resultados un tanto confusos. En medio de estas dificultades, además, se anunció con alegría que la princesa Beatriz de York está esperando su segundo hijo.
Conmoción en la corona británica: el oscuro apodo que Guillermo le puso a Harry
Según el escritor Omid Scobie, el príncipe Guillermo habría comenzado a referirse a su hermano con el apodo de "desertor", ya que Harry decidió alejarse de todas las obligaciones de la realeza junto a su esposa Meghan Markle.
Este apodo refleja el profundo deterioro en la relación entre los hermanos, que alguna vez fueron muy cercanos pero que ahora están distantes por la decisión que tomó la familia de Sussex.
Llora la corona: se agrava el cáncer de Carlos III
Desde hace dos semanas que la salud de Carlos III es una preocupación para toda la prensa y para los seguidores de la corona británica: el monarca debió ser hospitalizado durante unos pocos días.
En ese período, la reina Camila, su esposa, ha suplantado temporariamente a Carlos en las actividades oficiales. Guillermo, mientras tanto, continúa ganando trascendencia al ser el heredero natural del trono.
¿Por qué los príncipes William y Harry están distanciados?
El conflicto entre los hermanos no estalló de la noche a la mañana. Fue una suma de tensiones acumuladas, de desacuerdos silenciosos, gestos malinterpretados y caminos de vida que poco a poco se alejaban.
William, como futuro rey, ha sido educado bajo una estricta estructura monárquica, con deberes ineludibles y el peso del protocolo sobre sus hombros. Harry, en cambio, siempre fue el "hermano menor", con más libertad, pero también menos espacio para decidir su destino dentro del sistema.
Estas diferencias de fondo se intensificaron cuando Harry comenzó a cuestionar el papel de la monarquía en su vida, sintiéndose atrapado y vigilado por una institución que, según él, priorizaba la imagen antes que el bienestar de sus propios miembros.
