La economía brasileña seguirá creciendo con base en el mercado doméstico y el desafío de Brasil es coordinar el crecimiento evitando el avance de la inflación, dijo este martes Luciano Coutinho, presidente del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).

Coutinho afirmó que el aporte del Tesoro en el BNDES no se producirá de inmediato. “Aún va a demorar un poço”, señaló durante una conferencia en San Pablo.

“Lo que tenemos que hacer este año es moderar el crecimiento del consumo de las familias y acelerar las inversiones”, comentó. Sobre los gastos del gobierno, Coutinho garantizó que la presidenta Dilma Rousseff “tiene la determinación de mantener una política fiscal dura”, pero sin que derive en una recesión.

Según Coutinho, uno de los sectores que será foco de las inversiones del gobierno es el de logística, considerada punto llave para el Mundial de Fútbol 2014 y las Olimpíadas de 2016.

El presidente del BNDES reafirmó la intención de la entidad de abrir espacio al sector privado para el financiamiento de proyectos de largo plazo. Coutinho señaló que el BNDES debe mantener este año su participación de mercado.

Al ser consultado sobre las negociaciones para la fijación del nuevo salario mínimo, afirmó que el acuerdo cerrado con las centrales sindicales permitió ganancias reales de salarios y ahora “tenemos que pensar si esa regla debe mantenerse a largo palzo”.