

El Gobierno de los Estados Unidos decretó una política de tolerancia cero en cuestiones migratorias. Desde la asunción de su segundo mandato, el presidente Donald Trump impuso un régimen más restrictivo para la obtención de las visas, aumentó las tarifas y bloqueó el ingreso al país a ciudadanos de algunos países.
En este contexto, el Departamento de Estado publicó un aviso en el Registro Federal donde se notifica el inicio de una prueba piloto que obliga a ciudadanos de algunos países a pagar una fianza de 5,000, 10,000 o hasta 15,000 dólares para solicitar una visa.
Quienes deberán pagar 15,000 dólares para obtener una visa
Según el comunicado oficial del Departamento de Estado de los Estados Unidos publicado el 5 de agosto de 2025, a partir del 20 de agosto de 2025 comenzará una prueba piloto para la aplicación de la visa estadounidense que durará 12 meses.

Dentro de este periodo, ciudadanos de países con altas tasas de permanencia ilegal y con controles internos de documentos considerados deficientes podrán ser obligados a pagar un depósito de hasta 15,000 dólares.
Se trata de una medida dirigida a los solicitantes de visas de turismo o negocios. De acuerdo a la información disponible, el dinero será reembolsado para todos los viajeros que abandonen el país dentro del plazo estipulado de su visa. No obstante, quienes incumplan sus obligaciones con el país, no recibirán su dinero de vuelta y podrían enfrentar grandes problemas con la ley.
Cambia el examen para la ciudadanía estadounidense: cómo será a partir de ahora
En la misma línea de las políticas anti inmigratorias mencionadas, Trump anunció que planea endurecer las pruebas de ciudadanía con el objetivo de aumentar la exigencia y recrudecer los controles.
Durante su primer mandato, Donald Trump anunció cambios en los términos del examen para que la guía fuera de 128 preguntas. Este fue el primer intento por aumentar la dificultad del ingreso al país. Ahora, el líder republicano declaró ante los medios que considera que el examen actual es "muy fácil" y por eso deberá sufrir modificaciones.

En este sentido, Joseph Edlow, director del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS), dijo en una entrevista con The New York Times que "el examen tal como está ahora no es muy difícil". "Es fácil memorizar las respuestas. No creo que estemos cumpliendo con el espíritu de la ley", señaló al medio estadounidense.
Si bien por el momento no hay información certera sobre cuáles serán las modificaciones concretas que serán aplicadas sobre el examen, las autoridades han avanzado que probablemente aumentarán la cantidad de respuestas correctas obligatorias.














