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Síndrome del túnel carpiano: cuáles son los síntomas de esta patología y de qué forma se puede evitar

Descubre qué es el síndrome del túnel carpiano, los síntomas característicos y las posibles tratamientos.

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Las patologías no transmisibles son la causa principal de muerte a nivel mundial, representando el 71% de los decesos anuales, según los datos compartidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Para reducir las probabilidades de desarrollar alguno de estas padecimientos, los especialistas recomendaron reducir los posibles factores de riesgo. Por ese motivo, es necesario conocer qué es el síndrome del túnel carpiano, cuáles son los síntomas y cuáles son las terapias posibles.

¿Qué es el síndrome del túnel carpiano?

Según explica el portal sobre salud Mayo Clinic, el síndrome del túnel carpiano es una afección que se produce por la compresión del nervio mediano en la muñeca, lo que puede causar dolor, entumecimiento y debilidad en la mano y los dedos. Este síndrome es común entre personas que realizan movimientos repetitivos con las manos, como teclear o usar herramientas manuales y puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes lo padecen.

Los síntomas del síndrome del túnel carpiano suelen empeorar durante la noche y pueden incluir sensaciones de hormigueo o ardor en los dedos. El tratamiento puede variar desde cambios en la actividad y el uso de férulas, hasta intervenciones quirúrgicas en casos más severos. La detección temprana y el manejo adecuado son clave para prevenir complicaciones a largo plazo.

¿Cuáles son los síntomas del síndrome del túnel carpiano?

Los síntomas del síndrome del túnel carpiano incluyen:

1. Hormigueo o entumecimiento: Sensaciones de hormigueo y entumecimiento en los dedos (pulgar, índice, medio y anular), que pueden extenderse desde la muñeca hasta el brazo. Estos síntomas pueden aparecer al sostener objetos o durante la noche y a menudo se alivian al sacudir las manos.

2. Debilidad: Sensación de debilidad en la mano, lo que puede llevar a dejar caer objetos. Esto se debe al entumecimiento o a la debilidad de los músculos del dedo pulgar, controlados por el nervio mediano.

Es importante consultar a un médico si estos síntomas interfieren con las actividades diarias o el sueño, ya que pueden causar daños permanentes si no se tratan.

¿Cómo saber si una persona tiene síndrome del túnel carpiano?

El diagnóstico del síndrome del túnel carpiano comienza con una evaluación exhaustiva de los síntomas del paciente. El proveedor de atención médica revisará el patrón de los síntomas, prestando especial atención a la localización del entumecimiento y el dolor, así como a las actividades que los desencadenan, como sostener objetos o la posición de la muñeca durante la noche. Además, se realizará un examen físico para evaluar la sensibilidad en los dedos y la fuerza muscular, donde ciertas maniobras pueden provocar la aparición de los síntomas.

Para confirmar el diagnóstico, se pueden utilizar pruebas adicionales como la electromiografía y el estudio de conducción nerviosa, que miden la actividad eléctrica en los músculos y nervios. También se pueden realizar radiografías para descartar otras condiciones, aunque estas no son útiles para el diagnóstico directo del síndrome. En algunos casos, se recomienda una ecografía para visualizar la compresión del nervio mediano en la muñeca, proporcionando así una imagen más completa de la situación.

¿Cómo prevenir y tratar el síndrome del túnel carpiano?

El síndrome del túnel carpiano es una afección que puede ser tratada y prevenido si se actúa a tiempo. Para aliviar los síntomas en sus primeras etapas, es fundamental hacer pausas frecuentes para descansar las manos y evitar actividades que agraven el problema. Además, aplicar compresas frías puede ayudar a reducir la hinchazón y la incomodidad.

Si los síntomas persisten, se pueden considerar tratamientos no quirúrgicos como el uso de una férula en la muñeca, que mantiene la articulación inmóvil durante la noche, aliviando así el hormigueo y el entumecimiento. También se pueden utilizar antiinflamatorios no esteroides (AINE) para el dolor, aunque su eficacia en el tratamiento del síndrome del túnel carpiano es limitada. En algunos casos, las inyecciones de corticoides pueden ser una opción para reducir la inflamación y aliviar la presión sobre el nervio mediano.

Si los síntomas son severos o no responden a tratamientos conservadores, la cirugía puede ser necesaria. Existen dos técnicas principales: la cirugía endoscópica, que utiliza un pequeño dispositivo para realizar incisiones mínimas y la cirugía abierta, que implica una incisión más grande en la palma de la mano. Es importante discutir los riesgos y beneficios de cada opción con un cirujano antes de proceder, ya que la recuperación puede variar y algunos síntomas pueden persistir incluso después de la intervención.

Síndrome del túnel carpiano: posibles factores de riesgo

El síndrome del túnel carpiano puede verse influenciado por diversos factores de riesgo que, aunque no lo causan directamente, aumentan la probabilidad de irritación del nervio mediano. Entre estos factores se encuentran condiciones anatómicas como fracturas o artritis, el sexo femenino, enfermedades crónicas como la diabetes, afecciones inflamatorias, la obesidad, cambios en los líquidos corporales y ciertos medicamentos. Además, factores laborales, como el uso de herramientas que vibran o movimientos repetitivos de la muñeca, también pueden contribuir al desarrollo de esta afección.

En conclusión, conocer los síntomas de las enfermedades y las opciones de tratamiento disponibles es fundamental para tomar decisiones informadas sobre nuestra salud. No dudes en consultar a tu médico y seguir sus recomendaciones.

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