Astigmatismo: cuáles son los síntomas para detectarlo y cómo se puede tratar
Descubre qué es el astigmatismo astigmatismo, los síntomas característicos y las posibles tratamientos.
Según el sitio web de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades no transmisibles constituyen la causa predominante de fallecimiento y limitaciones físicas a nivel global. No obstante, afirman que gran cantidad de ellas pueden evitarse mediante la disminución de los elementos de riesgo habituales.
Por ese motivo, conoce qué es el astigmatismo astigmatismo, cuáles son sus síntomas, cómo reducir los factores de riesgo y cuáles son los mejores tratamientos disponibles.
¿Qué es el astigmatismo astigmatismo?
Según explica el portal sobre salud Mayo Clinic, el astigmatismo es un defecto refractivo del ojo que provoca una visión borrosa o distorsionada. Esta condición ocurre cuando la córnea, la parte frontal del ojo, tiene una forma irregular, lo que impide que la luz se enfoque correctamente en la retina. Como resultado, las personas con astigmatismo pueden experimentar dificultades para ver objetos tanto de cerca como de lejos.
El astigmatismo es común y puede presentarse en combinación con otros problemas visuales, como la miopía o la hipermetropía. A menudo, se diagnostica mediante un examen ocular completo y puede corregirse con gafas, lentes de contacto o cirugía refractiva. Es importante que quienes experimenten síntomas de visión borrosa consulten a un profesional de la salud visual para recibir el tratamiento adecuado.
¿Cuáles son los síntomas del astigmatismo astigmatismo?
Los síntomas del astigmatismo incluyen visión borrosa o distorsionada, cansancio o incomodidad ocular, dolores de cabeza, dificultad para ver en la oscuridad y la tendencia a entrecerrar los ojos.
¿Cómo saber si una persona tiene astigmatismo?
El diagnóstico del astigmatismo se realiza a través de un examen ocular completo, que incluye diversas pruebas para evaluar la salud ocular. Durante este examen, el oculista utiliza varios instrumentos y puede dirigir luces intensas hacia los ojos del paciente, lo que permite una evaluación detallada de la visión y la estructura ocular.
Una parte fundamental del examen es la refracción, que mide cómo los ojos desvían la luz. El médico pedirá al paciente que mire a través de diferentes lentes para determinar la receta óptica adecuada, asegurando así que el paciente obtenga una visión clara, ya sea con anteojos o lentes de contacto.
¿Cómo tratar el astigmatismo astigmatismo?
El astigmatismo es un error de refracción que puede afectar la claridad de la visión. Para tratarlo, se pueden utilizar lentes correctivas, como anteojos o lentes de contacto, que ayudan a compensar las curvaturas irregulares de la córnea o el cristalino. Los anteojos son una opción común y práctica, mientras que los lentes de contacto ofrecen una alternativa más estética y, en algunos casos, pueden utilizarse en tratamientos como la ortoqueratología, que busca modificar la forma del ojo durante la noche.
Además de los lentes correctivos, la cirugía refractiva es otra opción para corregir el astigmatismo. Este procedimiento implica el uso de láser para remodelar la córnea, mejorando así la visión y reduciendo la dependencia de anteojos o lentes de contacto. Existen diferentes técnicas quirúrgicas, como LASIK y LASEK, que se adaptan a las necesidades del paciente. Es fundamental que un especialista evalúe si eres un candidato adecuado para la cirugía.
Para prevenir el astigmatismo, es importante realizar chequeos oculares regulares, especialmente si hay antecedentes familiares de problemas visuales. Mantener una buena higiene ocular y evitar el uso prolongado de lentes de contacto sin supervisión médica también son medidas clave. Consultar con un oculista sobre las mejores prácticas para el cuidado de la vista puede ayudar a minimizar el riesgo de desarrollar o agravar el astigmatismo.
Para finalizar, es aconsejable consultar con un especialista en salud ante cualquier duda o síntoma. La información médica puede ser compleja y es importante acudir a fuentes confiables para vitar la automedicación y basar las decisiones de tratamiento en evidencia clínica.