Por eso, conoce qué es la anemia por deficiencia de hierro, cuáles son sus síntomas, cómo reducir los factores de riesgo y cuáles son las mejores terapias disponibles.
¿Qué es la anemia por deficiencia de hierro?
¿Cuáles son los síntomas de la anemia por deficiencia de hierro?
La anemia por deficiencia de hierro puede presentar síntomas como fatiga extrema, debilidad, piel pálida, dolor torácico, latidos cardíacos rápidos o falta de aliento, dolor de cabeza, mareos o vértigo, manos y pies fríos, inflamación o dolor en la lengua, uñas quebradizas, antojos inusuales de sustancias no nutritivas, como hielo, tierra o almidón y falta de apetito, especialmente en bebés y niños con anemia ferropénica.
¿Cómo saber si una persona tiene anemia por deficiencia de hierro?
El diagnóstico de la anemia por deficiencia de hierro se realiza mediante pruebas que evalúan el tamaño y color de los glóbulos rojos, el hematocrito, los niveles de hemoglobina y la ferritina. En esta anemia, los glóbulos rojos son más pequeños y pálidos de lo normal, el hematocrito y la hemoglobina están por debajo de los valores normales y la ferritina indica una baja reserva de hierro.
Además de estas pruebas, el médico puede solicitar pruebas adicionales como la endoscopia, colonoscopia y ecografía para identificar la causa subyacente de la anemia por deficiencia de hierro, como sangrado gastrointestinal o fibromas uterinos. Estas pruebas ayudan a descartar otras posibles causas de la anemia y determinar el tratamiento adecuado.
¿Cómo tratar la anemia por deficiencia de hierro?
La anemia por deficiencia de hierro se puede prevenir o tratar tomando suplementos de hierro. Estos pueden ser comprimidos de venta libre o líquidos para bebés y niños. Es importante tomar los comprimidos de hierro con el estómago vacío y evitar tomarlos con antiácidos. Además, se recomienda tomarlos con vitamina C para mejorar la absorción del hierro.
Si los suplementos de hierro no aumentan los niveles de hierro en sangre, es necesario tratar la causa de fondo de la deficiencia. Esto puede incluir el uso de medicamentos para aligerar el flujo menstrual fuerte, antibióticos para tratar úlceras pépticas o cirugía para extirpar pólipos, tumores o fibromas que sangran. En casos graves, puede ser necesario administrar hierro por vía intravenosa o realizar transfusiones de sangre.
La deficiencia de hierro no se corrige de inmediato, por lo que es posible que se necesite tomar suplementos durante varios meses o más. Es importante seguir las indicaciones del médico y realizar análisis de sangre periódicos para medir los niveles de hierro y asegurarse de que las reservas estén repuestas.