

El brioso andar de Los Pumas por la Copa del Mundo Inglaterra 2015 los llevó a ingresar entre los ocho mejores del planeta, por tercera vez consecutiva. Los cuartos de final, ahora, son parte habitual del escenario de un rugby argentino que crece y se proyecta hacia un futuro mejor. Y allí se medirán con un rival conocido en mundiales: Irlanda.
Este seleccionado que representa a un país soberano, miembro de la Unión Europea y ocupa una buena porción de la isla homónima será rival del seleccionado argentino. Se tratará de un duelo muy complicado ya que los europeos son bicampeones del Torneo de las Seis Naciones y cuentan con un notable poderío en su rugby.
Sin embargo, la Argentina posee herramientas para afrontar este enorme desafío. Culminada la primera fase de la competencia, el conjunto de Daniel Hourcade se erigió como el más goleador con 179 puntos anotados, por encima de Sudáfrica (176) y Nueva Zelanda (174). Aun así se medirá ante una de las potencias no solo en el ámbito deportivo.
Este pequeño país, que cuenta con una población de unos 4,6 millones de habitantes y una densidad de 65,3 habitantes/km2, tuvo un pico ascendente en su economía y fue ejemplo internacional. La República de Irlanda tuvo un crecimiento económico espectacular en las dos décadas del período 1980-2000, donde pasó de ser un país de pobreza, a uno de los países con el PBI por habitante más alto del mundo. Sin dudas, este cambio estuvo relacionado con la llegada de innumerables macroempresas mundiales que establecieron su sede en aquel país, gracias a las políticas gubernamentales de ese momento.
Pero no siempre fue todo vientos a favor para los irlandeses. El moderno Estado irlandés consiguió su independencia efectiva del Reino Unido recién en 1922, tras una guerra de independencia que acabó con la firma del Tratado anglo-irlandés. Por el contrario, Irlanda del Norte (su vecino de isla) optó por permanecer en el Reino Unido.

Según datos de fines de 2012, el PBI anual de Irlanda es de u$s 210.416 millones, mientras que el ingreso per cápita es de u$s 45.8882.
En tanto, en el plano deportivo, el equipo del Trébol cuenta con un florido historial, ya que se coronó campeón de Europa en 13 oportunidades. Sin embargo, en las siete Copas del Mundo disputadas hasta aquí (Inglaterra 2015 es la octava) jamás logró superar la barrera de los cuartos de final.
Para Los Pumas, se trata de una gran oportunidad para capitalizar. El acceso a las semifinales está a un paso de distancia por lo que buscarán dar el máximo para alcanzar el nuevo objetivo. Nicolás Sánchez, apertura argentino, habló sobre el rival de turno. En relación al juego de sus forwards, destacó que “sabemos que ellos pescan mucho y tratan de ensuciar los rucks, posiblemente no jueguen ni M’Onney ni O’Brien, que son los grandes pescadores, pero seguramente el que entre lo hará de la misma forma así que trataremos de que no puedan hacerlo”.
Lo mejor de Irlanda, dijo el tucumano, es que “tienen un equipo muy aceitado y que no cambia su forma de juego a pesar de cambiar jugadores. Conservan muy bien la pelota, es uno de sus puntos altos”.
Por su lado, el tercera línea Pablo Matera afirmó que lo que le preocupa sobre el rival que enfrentará este domingo es “la cantidad de breakdowns que puede haber, ya que juegan un rugby muy frontal. Nosotros tuvimos 70 rucks el partido pasado y ellos 140. Son muy buenos ahí. Lo vamos a trabajar y es algo a tener muy en cuenta”.
Juan Imhoff, por su parte, también aportó su visión sobre este gran encuentro que tienen Los Pumas por delante. “La verdad que me dan mucho más miedo los jugadores que entraron, siendo suplentes, sin tener minutos, bajo mucha presión, que cuando lo hicieron sacaron un partido contra Francia con una solidez admirable. Obviamente que uno, conociendo a los jugadores, en estas instancias son los que hacen la diferencia por dar un poquito más, pero también tengo miedo al hambre de los jugadores que entran en su lugar”, sostuvo en relación a los cambios que introducirán los irlandeses este domingo.
Acerca de si Irlanda tiene más presión que la Argentina, por el hecho de no haber estado nunca en semifinales de un Mundial, el rosarino no dejó dudas. “En esta etapa, la presión es tan grande que no se puede medir, es para los dos equipos igual por el hecho de querer ganar y seguir en esta Copa del Mundo”, manifestó el número 11.
Los Pumas se medirán este domingo, desde las 9 (hora argentina), en el estadio Millenium de Cardiff (Gales) por un lugar en semifinales. Solamente en 2007, torneo en el que Sudáfrica se hizo con la copa, el equipo conducido por Agustín Pichot y entrenado por Marcelo Loffreda, la selección argentina de rugby logró saltar el cerco de las potencias mundiales. ¿Habrá llegado el momento de volver a hacerlo?













