En esta noticia

Al sur del estado de Michoacán, enclavado entre montañas boscosas y rodeado de paisajes que parecen salidos de una pintura, se encuentra uno de los pueblos más fascinantes de México.

Tacámbaro, reconocido como Pueblo Mágico, reúne en su geografía una mezcla única de historia, naturaleza y tradición. Su encanto radica en su arquitectura colonial, sus calles adoquinadas, su clima cambiante, su pasado purépecha y sus impresionantes parajes naturales.

Pueblo Mágico con historia y tradición purépecha

El pueblo mágico de Tacámbaro destaca por su belleza natural y también guarda en sus calles una historia profunda que inicia mucho antes de la llegada de los españoles. Fue un importante asentamiento purépecha hasta el siglo XVI, cuando los agustinos establecieron ahí una misión y fundaron la Capilla de Santa María Magdalena, cuyos restos aún pueden visitarse.

Este pueblo ha sido testigo de eventos clave para Michoacán, como su nombramiento temporal como capital del estado y su participación durante la Intervención Francesa, cuando tropas mexicanas derrotaron a un ejército belga.

Caminar por sus plazuelas y callejones es también recorrer siglos de historia. Entre los puntos más emblemáticos se encuentran la Catedral de San Jerónimo, el Santuario de la Virgen de Fátima -donde se resguardan imágenes traídas desde Europa y el Caribe- y el Centro Cultural Amalia Solórzano, que rinde homenaje a la vida del general Lázaro Cárdenas.

Escapada perfecta para disfrutar la naturaleza de Michoacán

Tacámbaro ofrece una escapada ideal para quienes buscan desconexión y contacto con la naturaleza. Rodeado por montes de pino y encino, el municipio alberga escenarios naturales que invitan al asombro. Uno de los más impactantes es la cascada de Arroyo Frío, con más de 60 metros de caída. En sus alrededores hay un balneario natural con aguas de manantial que fluyen a lo largo del año.

Otros atractivos incluyen la laguna de La Magdalena y el Parque Ecológico Cerro Hueco, donde se pueden realizar actividades de senderismo, observación de flora y fauna, y paseos al aire libre.

Tacámbaro: un rincón michoacano que honra sus raíces y su sabor

Además de su entorno natural e histórico, Tacámbaro se distingue por la autenticidad de sus tradiciones artesanales y culinarias. En la Casa del Artesano es posible encontrar desde canastas tejidas con hoja de pino hasta huaraches, tapices y bordados elaborados a mano por artesanos locales. Cada pieza es testimonio vivo de la herencia purépecha que persiste en la región.

La oferta gastronómica no se queda atrás. Platos típicos como las carnitas, el aporreadillo, la sopa de cola de buey y los uchepos son imperdibles. Además, el mezcal artesanal producido en la zona es reconocido por su calidad, mientras que frutas como el aguacate, la caña y la zarzamora dan un toque dulce a la experiencia culinaria.

Uno de los tesoros más singulares de Tacámbaro es la Alberca del Rey Tacamba, un lago sagrado situado en el cráter de un antiguo volcán. Este sitio está envuelto en leyendas locales y rodeado de vegetación que potencia su carácter místico. Se trata de un lugar que sintetiza el espíritu de este Pueblo Mágico: natural, ancestral y profundamente michoacano.