Falta poco para el comienzo del 2024y el cambio de año es una ocasión especial y única para realizar rituales y así focalizar la vida que deseas. En el año nuevo se renuevan las energías y las intenciones, y hay que aprovechar.
Si tu problema es que te cuesta disfrutar del presente y divagas en lo que pasará, y el futuro te genera ansiedad, este rito efectivo basado en la cultura griega es perfecto. Los griegos creían en dos dioses del tiempo: Cronos y Kairós; el segundo será quién te ayudará a enfocarte en el aquí y ahora.
El rito para invocar a Kairós y vivir en el presente
Según los antiguos griegos, Cronos era el Dios que marcaba los minutos y las horas de la vida cotidiana. Mientras que Kairós se regía por un tiempo extraordinario, era quien otorgaba la magia de estar en el lugar correcto en el momento adecuado.
Kairós era la representación del tiempo de los dioses, el de los actos y sucesos importantes, el de los rituales y celebraciones que tienen un impacto en la vida. Esta práctica ayudará a enraizar el presente, reconocer el paso del tiempo y retenerlo en un momento infinito.
Paso a paso para invocar al Dios Kairós
Lo podrás realizar durante la Noche Vieja, justo antes de la medianoche que marque el inicio del año nuevo. Para hacerlo no necesitarás elementos especiales, solo encontrarte en una habitación tranquila para meditar.
La fecha elegida para la realización de este ritual no es casual. También se puede llevar a la práctica en el solsticio de invierno o algún día de la época cuando la luz empieza ganarle minutos a la noche.
Para hacerlo deberás meditar siguiendo esta simple guía de preguntas y reflexiones. Una vez que termines, tómate unos momentos para conectar y regresa a tus actividades diarias.
1. Desacelerar
El tiempo de los dioses es presencia. Si corres, no puedes estar presente, te pierdes los detalles y la oportunidad. El Año Nuevo invita a la búsqueda interior, a retirarse y pasar cuentas con uno mismo.
2. Busca la claridad
¿Qué intención tienes? ¿Cuál es tu propósito? ¿Para qué quieres realizar este ritual? Si no sabes qué pretendes, no hagas rituales. Antes de nada, como rezaba el oráculo de Delfos, conócete a ti mismo.
3. Marca tus límites
Si no sabes protegerte, tu ritual podrá ser interferido por cualquier cosa de tu vida cotidiana. ¿Sabes decir no?
4. Permanece presente
Donde va tu atención, va tu energía. Para honrar el rito, desconecta de tu móvil, de todo. Al final, todos nos convertimos en aquello en lo que nos enfocamos.