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El príncipe de Gales, William, se reunió este lunes con familiares de las víctimas de los atentados que tuvieron lugar el 7 de julio de 2005 en Londres, en los que perecieron 52 personas y resultaron heridas cientos de ellas, conocidos en el Reino Unido como el 7/7.

Después del servicio religioso celebrado en la catedral de San Pablo al que asistieron el primer ministro, Keir Starmer, junto a representantes de instituciones y la realeza, el príncipe William asistió a otra conmemoración en el Jardín Memorial del 7 de julio en Hyde Park, antes del comienzo de otro memorial.

El acto del príncipe William que lo sumergió en un profundo dolor

El príncipe y futuro heredero al trono ingresó al acto junto a Thelma Stober, una de las supervivientes de los ataques con bombas simultáneos en tres estaciones de metro y un autobús de dos plantas, y a Gerald Oppenheim, vicepresidente de National Emergencies Trust.

Allí dejó una flor, la colocó junto a la placa en la que se recuerdan los sucesos y se mantuvo unos segundos frente a ella en silencio.

Luego mantuvo un encuentro con 200 personas entre las que se encontraban supervivientes, así como familiares y amigos de los fallecidos, con quienes tuvo la oportunidad de hablar.

Este lunes se celebran 20 años de estos hechos que pusieron en jaque la seguridad del Reino Unido cuando cuatro terroristas suicidas hicieron detonar las bombas que llevaban en sus mochilas en tres trenes del metro y un autobús.

El rey Carlos III recordó los atentados y lo hizo con un sentido mensaje

Londres, 7 jul (EFE).- El rey británico, Carlos III, cree que los "horrores" de los atentados del 7 de julio de 2005 en Londres "nunca se olvidarán", aunque demostraron la capacidad del país para unirse en los malos momentos, en un mensaje a la nación por el 20 aniversario de los ataques terroristas.

"Aunque los horrores nunca se olvidarán, podemos reconfortarnos con la forma en que esos sucesos reunieron a las comunidades en solidaridad, consuelo y determinación", dijo el monarca en el mensaje.

"Es este espíritu de unidad el que ha ayudado a Londres, y a nuestra nación, a curarse", añadió.

El 7 de julio de 2005, cuatro ataques suicidas perpetrados por yihadistas en el transporte público de Londres (metro y autobús) causaron 52 muertos y más de 700 heridos.

El rey Carlos III pidió usar la conmemoración de la masacre para reafirmar el compromiso con una sociedad en la que "gente de todas las religiones y procedencias puedan vivir juntos con respeto mutuo y comprensión, firmes siempre contra aquellos que buscan dividirnos".

También instó a los británicos a recordar el "coraje y la compasión extraordinarios" que demostraron tras los atentados del 7-J.

Está previsto que varios miembros de la familia real británica participen en actos de homenaje y recuerdo a las víctimas en diferentes puntos de la capital del país.

El duque y la duquesa de Edimburgo, Eduardo y Sofía, representarán al rey en el servicio nacional de conmemoración en la catedral de St Paul el lunes a las 11:30 hora local (10:30 GMT).

El príncipe de Gales, William, heredero de la Corona, se unirá a supervivientes y víctimas de los atentados en un acto religioso en los jardines memoriales de Hyde Park.

Fuente: EFE.