El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva está de gira en Europa, reforzando vínculos con otros mandatarios en vistas a su probable candidatura presidencial en las elecciones de 2022, que anunciaría desde febrero próximo.
En ese contexto, se reunió días atrás con el mandatario francés, Emmanuel Macron, y con el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez.
Y mientras en Europa la prensa escribe hace meses sobre el legado de la canciller alemana en funciones, Angela Merkel, quien tras 16 años al frente del gobierno alemán finalmente concluirá su gestión en unas semanas, otro mandatario con casi 15 años en el poder también ocupa titulares, aunque por motivos muy distintos.
Se trata del nicaragüense Daniel Ortega, que tras unas elecciones cuestionadas y no reconocidas por muchos países, -parte de las irregularidades fue que se hicieron con siete aspirantes a la presidencia encarcelados y tres partidos políticos opositores proscriptos- en enero comenzará su nuevo mandato por otros cinco años.
Desde 2007, se mantuvo ininterrumpidamente en el poder del que ahora es el segundo país más pobre de América, después de Haití.
En todo caso, cuando el diario español El Paísentrevistó a Lula y le preguntó cuál es su evaluación de esos comicios nicaragüenses, el brasileño hizo un paralelismo inédito.
"¿Por qué Angela Merkel puede estar 16 años en el poder y Ortega no?", dijo Lula.
Y aludió también a un exmandatario español. "¿Por qué Felipe González (presidente del Gobierno de España entre 1982 y 1996) puede mantenerse en el poder durante 14 años? ¿Cuál es la lógica que hay detrás?", le repreguntó al periodista.
También hizo un paralelismo entre el Lava Jato y la condena a prisión que lo inhabilitó de candidatearse en las últimas elecciones, que finalmente ganó Jair Bolsonaro, y el encarcelamiento de opositores nicaragüenses antes de los comicios del 7 de noviembre.
"No puedo juzgar lo que ha pasado en Nicaragua. Si Ortega detiene a los líderes de la oposición para que no se presenten en las elecciones, igual que hicieron contra mí, está completamente equivocado", dijo.
En referencia a sus propias presidencias, dijo que "cuando goberné, intentaron convencerme de que fuera a un tercer mandato y yo dije que noporque soy favorable a la alternancia en el poder".
"Dije en una entrevista que todo político que empieza a creer que es imprescindible o insustituible empieza a transformarse en un pequeño dictador.Yo he estado en contra de Daniel Ortega. El Frente Sandinista tiene mucha gente para ser candidato. También estuve en contra de Evo Morales, que ya había hecho dos mandatos extraordinarios. Y lo mismo con (Hugo) Chávez", afirmó Lula.