La famosa manada de elefantes errantes en China sigue copando titulares, ahora porque para evitar conflictos entre estos animales y la gente, las autoridades de la provincia de Yunnan, donde están ahora, decidieron evacuar a más de 150.000 residentes.
Son 14 elefantes, asiáticos, salvajes, y se están acercando a su hábitat tradicional después de vagar durante cerca de año y medio.
En la noche del domingo, la manada atravesó el río Yuanjiang gracias a una guía artificial y siguió hacia el sur, dijo Wan Yong, perteneciente a la jefatura encargada de vigilar a los elefantes errantes, en una rueda de prensa.
Wan dijo que se desplegaron más de 25.000 oficiales de policía y trabajadores, así como un gran número de vehículos y drones para vigilar y guiar a los elefantes errantes.
Las autoridades facilitaron 180 toneladas de alimentos a los elefantes durante su periplo de unos 17 meses: contando desde que la manada se despidió de su hábitat original en una reserva natural en la prefectura autónoma de Xishuangbanna, en el sur de Yunnan.
Los elefantes asiáticos salvajes son una especie emblemática de la selva tropical y están bajo la protección estatal nivel A de China. Mediante mayores esfuerzos de protección silvestre y ambiental, su población en el país creció hasta llegar a cerca 300, en su mayoría dispersos en la provincia de Yunnan.