El coronavirus sigue avanzando en Brasil –hasta ahora reportó 7910 casos positivos y 252 muertes por Covid-19– y presiona cada vez más a la economía brasileña.
Bank of America redujo hoy su pronóstico para el PBI brasileño en 2020 a una contracción de 3,5% desde una caída de 0,5%, dijo la institución en un informe, argumentando el fuerte impacto en el consumo y la inversión por la pandemia de coronavirus.
Para contener la crisis Brasil, anunció un paquete de medidas por u$s 38 mil millones
El banco también revisó su pronóstico para el tipo de cambio en Brasil, ya que ahora ve que el dólar se negociará en 5,2 reales desde los 4,8 reales de una estimación previa. Brasil, de hecho, cerró marzo con una de las devaluaciones trimestrales más fuertes de su historia (29,90%).
El Ministerio de Economía informó que la recaudación fiscal de febrero (u$s 22.234 millones) cayó un 2,71% con respecto al mismo mes de al año anterior.
Mientras tanto, una proyección de la Asociación Nacional de Bares y Restaurantes brasileña estima que, sólo en ese sector, hasta unas 600.000 personas podrían haber perdido sus empleos desde el comienzo de la pandemia.
Alerta por subregistros
Según el diario Folha de Sao Paulo, los equipos de atención primaria en varias ciudades y estados de Brasil están empezando a alertar sobre un alto subregistro de casos sospechosos de Covid-19 en el país.
Según Folha, en algunos estados y municipios se informa sólo un caso por cada 30 infecciones con síntomas compatibles con coronavirus.
Según la Sociedad Brasileña de Medicina Familiar y Comunitaria (SBMFC) – que representa a 6000 médicos que trabajan en 47.700 equipos de atención primaria en todo el país–, la falta de kits para pruebas y la falta de una definición específica de casos sospechosos por parte del Ministerio de Salud, que comanda Henrique Mandetta, hizo que muchos pacientes no ingresaran a las estadísticas de coronavirus.
Coronavirus: Trump y Bolsonaro "intercambiaron experiencias" por teléfono
A falta de instrucciones precisas por parte del ministerio, los médicos tuvieron que guiarse por las pautas técnicas de vigilancia epidemiológica de sus municipios o estados, que difieren entre sí, dificultando la estandarización de la información a nivel nacional. "El resultado es que no sabemos qué informar realmente y el número real de casos", le dijo Denize Ornellas, directora de comunicación de SBMFC, a Folha.
El ministerio de Salud, por su parte, anunció que creará una central para realizar llamadas telefónicas a 125 millones de ciudadanos (el 60% de la población) para controlar su estado de salud e identificar posibles casos del nuevo coronavirus.