Ni con film ni con papel aluminio: existe un modo ideal para guardar el queso en la heladera y que se mantenga fresco por más tiempo, sin que se ponga duro o se heche a perder.
Los lácteos y, en especial los quesos, son un alimento delicado si no se los almacena de manera adecuada.
Los cambios de temperatura, la exposición al aire y el contacto con otros alimentos son factores que pueden alterar su textura, su sabor e incluso acelerar su deterioro, a pesar de que estén guardados dentro de la heladera.
El truco para guardar el queso en la heladera y que se mantenga fresco por más tiempo
El modo más recomendable para guardar quesos es usando un papel diseñado específicamente para este tipo de alimentos.
Este papel tiene una superficie porosa que protege el queso sin aislarlo por completo del aire, lo que evita la acumulación de humedad y además favorece una maduración adecuada.
El mismo suele conseguirse en comercios especializados en lácteos y en fiambrerías de gran tamaño, sin embargo, también puede usarse como alternativa papel vegetal o papel para hornear.
El procedimiento recomendado es envolver el queso directamente con una hoja de alguno de estos papeles. Como medida adicional, se puede cubrir el envoltorio con un paño de algodón o colocarlo dentro de un recipiente con tapa que no cierre de forma hermética.
El método resulta especialmente adecuado para quesos semicurados y curados, como el gouda, el cheddar o el parmesano.
Otra alternativa, sin usar este tipo de papeles, es almacenar el producto en un frasco o recipiente de vidrio o plástico con tapa, siempre que esta no genere un cierre hermético.
El objetivo es permitir un leve ingreso de aire, condición necesaria para evitar la aparición de moho y conservar la humedad justa.
Los mejores 3 quesos para ganar masa muscular
El queso no solo es una fuente de proteínas de alta calidad, sino que también aporta calcio, grasas saludables y un perfil de sabor único. A continuación, cinco quesos destacan por su impresionante contenido proteico:
Queso parmesano
El Parmigiano Reggiano es el líder indiscutible en contenido proteico. Tiene 36 gr de proteína por cada 100gr. Su textura dura y granulosa lo convierte en un ingrediente versátil para rallar sobre pastas, ensaladas o disfrutar en finas lascas como snack.
Queso Emmental
Conocido por sus icónicos agujeros, el Emmental es un queso de sabor suave y textura fundente. Su alto contenido proteico lo hace ideal para deportistas y personas activas. Además, es una excelente opción para gratinados y sándwiches.
Queso Roquefort
Este queso azul francés es famoso por su textura cremosa y su intenso sabor. Su combinación de proteínas y grasas saludables lo hace ideal para aportar energía y saciedad.