Dormir es mucho más que una pausa reparadora: es un reflejo de cómo somos y de cómo nos sentimos. Además de recargar energía y mantener el cuerpo sano, la posición que adoptamos al dormir puede revelar aspectos ocultos de nuestra personalidad, según afirman especialistas en lenguaje corporal y neurociencia.

Aunque muchas personas eligen su postura simplemente por comodidad, la ciencia del sueño sugiere que el inconsciente también juega un papel importante. Miedos, inseguridades, carácter e incluso la forma en que nos relacionamos con los demás podrían expresarse durante las horas de descanso.

¿Qué revela tu postura al dormir?

Según expertos en lenguaje corporal, cada posición adopta un significado diferente. A continuación, las más comunes y lo que podrían indicar sobre tu personalidad:

  • Estrella de mar (boca arriba, brazos y piernas extendidos): personas abiertas, generosas y buenas oyentes. Suelen tener una actitud receptiva y disfrutan ayudar a los demás.

  • De costado (posición lateral clásica): individuos sinceros, sociables y decididos. Valoran la honestidad y tienden a actuar con claridad frente a los desafíos.

  • De costado con piernas flexionadas (posición semi-fetal): personas tranquilas y resilientes. No temen al futuro y afrontan los problemas con actitud positiva.

  • Fetal (acurrucados, rodillas hacia el pecho): esta postura es la más común. Suele vincularse con personas sensibles, reservadas y analíticas. A veces ocultan sus emociones, pero son profundas en sus vínculos.

  • Boca abajo (sobre el estómago, brazos hacia adelante o costados): quienes duermen así suelen ser apasionados, meticulosos y amantes del control. Prefieren lo planificado antes que lo espontáneo.

  • Boca arriba (posición supina): personas estructuradas que priorizan la estabilidad. A veces pueden mostrarse más cerradas emocionalmente o mantener cierta distancia en sus relaciones.

¿Cuál es la mejor postura para la salud?

Desde el punto de vista médico, no todas las posturas son iguales. Según la Mayo Clinic, dormir de costado con la cabeza ligeramente elevada es una de las formas más saludables de descansar. Esta posición permite mejorar la circulación, reduce la presión sobre los órganos internos y puede minimizar los ronquidos al mantener despejadas las vías respiratorias.

En cambio, dormir boca arriba puede provocar apnea del sueño o problemas respiratorios, y hacerlo boca abajo suele generar molestias en el cuello y la columna.

Claves para conciliar el sueño más rápido

En un mundo cada vez más acelerado, los trastornos del sueño afectan a millones de personas. Para combatir el insomnio o el sueño interrumpido, los expertos recomiendan:

  • Mantener horarios regulares para acostarse y levantarse.

  • Cenar liviano y evitar el consumo de cafeína antes de dormir.

  • Crear un ambiente propicio: oscuro, silencioso y con temperatura adecuada.

  • Reducir la exposición a pantallas y dispositivos al menos 1 hora antes de dormir.

Dormir bien mejora el estado de ánimo, fortalece el sistema inmune y potencia la productividad. Por eso, cuidar tus hábitos nocturnos -y conocer mejor tu postura favorita- puede ser el primer paso hacia una vida más equilibrada.