Frente a la llegada de una nueva ola polar, cada vez más personas buscan alternativas eficientes para combatir el frío y que no disparen la boleta de luz o gas. En este marco, un nuevo dispositivo empieza a ganar terreno como reemplazo de las tradicionales estufas eléctricas: los paneles calefactores radiantes.
Además de ser un sistema más seguro y eficiente, ofrece un tipo de calor más confortable, uniforme y silencioso, ideal tanto para casas como para espacios comerciales, en estos días de bajas temperaturas.
La nueva alternativa para combatir el frío sin gastar mucha energía
Se trata de los paneles radiantes, unas superficies planas que pueden colocarse en paredes, techos o incluso suelos, y que utilizan tecnología de radiación infrarroja para calentar directamente objetos y personas, en lugar de calentar el aire, como lo hacen los sistemas convencionales.
Este tipo de calefacción genera una sensación térmica más natural y envolvente, similar al calor del sol, sin provocar corrientes de aire ni levantar polvo.
Vale destacar que este sistema consume menos energía que los métodos tradicionales: alrededor de 35 W por m2, lo que puede traducirse en un ahorro significativo en la factura eléctrica mensual. Además, se encienden al instante y distribuyen el calor de manera homogénea en todo el ambiente.
¿Cuáles son las ventajas de instalar paneles radiantes para el frío?
- Bajo consumo energético
- Calor uniforme e inmediato
- Mayor seguridad: sin superficies calientes ni riesgo de quemaduras
- Ideales para personas con alergias, ya que no levantan polvo
- Funcionamiento silencioso
- No usan gas ni generan combustión
- Instalación simple y rápida
- Casi sin mantenimiento
Además, la versatilidad es otro punto a favor dado que puede colocarse en diferentes lugares, ya sea en hogares, como en oficinas, comercios o restaurantes. Incluso, hay modelos que están preparados para uso en exteriores como terrazas o patios.
¿Cuánto cuesta en Argentina?
El precio de entrada de un panel calefactor radiante en tiendas online del país ronda los $ 400.000, aunque pueden conseguirse con descuentos y financiación en cuotas sin interés, lo que los convierte en una inversión accesible a mediano plazo.