

Tras la presentación de su “Plan 10/16. Bases para una política de desarrollo integral , el ex jefe de Gabinete, Rodolfo Terragno adelantó que hoy se reunirá con Eduardo Duhalde y dijo que sin un acuerdo multi partidario el país no tiene futuro. También resaltó que el crecimiento de los últimos años fue automático y que no mejoró la distribución del ingreso.
–¿Cuál es el sentido de la planificación de mediano plazo que propone?
–Hay que hacer acuerdos mínimos entre partidos políticos o no tendremos futuro. El ex presidente Eduardo Duhalde me invitó este lunes (por hoy) a exponer los puntos del programa que presento.
–¿Cree que la actual coyuntura política permite hacer este tipo de acuerdos?
–Si no lo permite, no hay destino. La problemática estructural de la Argentina es muy seria. Tendríamos que crecer 14 años sin parar al 5% para tener el ingreso per capita de Croacia hoy. No estoy hablando de imitar a Japón ni España. Hace falta invertir 2% del PIB en energía y eso es muy difícil de lograr sin políticas acordadas que tengan vigencia sin importar qué partido gobierne. Da vergüenza que al Papa tenga que hablar de pobreza para que sea titular en los diarios. Si no hay voluntad de sacar ciertos temas de la competencia política, no hay futuro.
–¿Qué opina de la ausencia de Lilita Carrió a la presentación de su plan?
–Carrió es una de las dirigentes más importantes de la Argentina y creo que hizo una contribución decisiva al plantear la necesidad de unir la ética con la acción política. Los medios dieron importancia a su ausencia, yo no.
–¿Cómo evalúa la política económica kirchnerista?
–Hubo un crecimiento automático en el periodo kirchnerista, impulsado por el ascenso de los precios de los commodities y la devaluación del 2002. Toda América Latina creció, incluido Haití. Aun así estamos muy lejos del desarrollo medio que podíamos tener y en materia de redistribución del ingreso no se hizo nada. Estos problemas no aparecen de la noche a la mañana, pero un gobierno puede agravarlos.
–¿Se perdió una gran oportunidad?
–Se hizo lo de la cigarra en lugar de lo de la hormiga. Ahora estamos pagando una política de subsidios totalmente distorsionadora de la que es fácil entrar pero no salir.
–¿Está decepcionado por el resultado del llamado al diálogo político?
–El diálogo siempre es positivo. Pero hay que ir con una agenda concreta y aprender a hacer concesiones. No hay acuerdos instantáneos, y debemos ser pacientes. No se trata de un ejercicio de esgrima para tocar el otro.
–¿Cómo está su relación con Julio Cobos?
–Cuando expulsaron a Cobos del radicalismo de por vida, yo seguí dialogando con él. Hay que mantener la fortaleza de los partidos. Tenemos que juntar a los radicales desperdigados y formar un gran partido poli clasista y dirimir lo interno a través de un procedimiento democrático. No creo en los partidos hechos a medida de un dirigente.
–¿Piensa que puede haber problemas de gobernabilidad después del 10 de diciembre?
–Espero que no. La gobernabilidad no es un bien del Gobierno, sino de la sociedad. Con el amplio control del oficialismo todo era una ficción, los debates en el recinto, en comisiones, nada tenía sentido.










