El enfoque tradicional para las inversiones que consideraban los temas ambientales y sociales era que los inversores sacrificaban retornos a cambio de una conciencia limpia. Pero las cosas han cambiado y los inversores ya no deben aceptar una rentabilidad más baja para satisfacer sus escrúpulos. El estilo de la administración de fondos evolucionó de manera que –particularmente en el caso de los fondos de jubilaciones– ya no bloquean a las compañías involucradas en ciertas industrias.

El área de mayor crecimiento en este tipo de inversión ha sido el de los fondos vinculados al cambio climático. Como cada vez se acepta más que el medio ambiente está amenazado por la actividad humana, los fondos de inversión socialmente responsable atraen mayor interés.

Emma Howard Boyd, titular del área de Inversión Socialmente Responsable (SRI, por la sigla en inglés) de la firma Jupiter, comentó que los administradores de fondos verdes creen que en la actualidad, a pesar de la volatilidad económica, están “viendo la coyuntura más interesante de los últimos 20 años en términos de inversiones relacionadas con la defensa del medio ambiente. La experta opinó que esto se debe a lo atractivo de las valuaciones y al enorme aumento en la actividad y el interés que ésta despierta, impulsada por la acción de los gobiernos, la demanda de productos sustentables por parte de los consumidores y la búsqueda de oportunidades por parte de las empresas.