

Gucci y Louis Vuitton, dos de los grandes nombres en artículos de lujo, lograron seguir incrementando sus ventas a través de una combinación de productos exitosos, marketing incesante, nuevos locales y la creciente demanda china de accesorios de marca.
Sin embargo, PPR y LVMH, los dos grupos franceses dueños de estas marcas de oro, tuvieron problemas en el segmento que apunta a una clientela menos rica. La semana pasada PPR dijo que su división de Artículos de Lujo registró en el primer semestre del año un incremento de 11% en las ventas y de 76% en las ganancias operativas. La tendencia fue impulsada por la popularidad de la marca Gucci y el aumento en la venta de las carteras de Bottega Veneta. Sin embargo, los resultados generales del grupo sufrieron el efecto de una caída de 4% en las ganancias operativas de la División Minorista.
Este desempeño mixto se vio también en los anuncios de su rival, LVMH, que informó que las ventas de los productos Louis Vuitton tuvieron un fuerte crecimiento pero las ganancias generales quedaron afectadas por el cierre por tiempo indefinido de la tienda por departamentos La Samaritaine, en París, por razones de seguridad.










