Cadbury Stani Adams, la filial local de la inglesa Cadbury Schweppes, es la líder del mercado local de chicles. Con Chiclets Adams, Beldent y Bazooka, tiene casi dos tercios del mercado. Sin embargo, el destino de esta última marca en la Argentina no está del todo claro, ya que la compañía afronta en Estados Unidos un juicio por su uso. Una resolución dictada la semana pasada, y divulgada ayer, favoreció a Cadbury en primera instancia.

Topps, la compañía estadounidense propietaria de Bazooka, autorizó a Stani –la empresa argentina originaria, previa a la compra de Cadbury– a que explote plenamente la marca hasta 1996. Pero, en 1999, le inició una acción judicial a Stani, argumentando que la firma local tenía “los derechos para el uso de los nombres , pero no contaba con el visto bueno para utilizar la tecnología necesaria para fabricarlos, según le plantearon al juez Charles S. Haight Jr, que entiende en el caso. La fórmula para la fabricación del Bazooka es secreta, como la de Coca-Cola y Pepsi.

“Una marca comercial es simplemente un símbolo de buena voluntad y no puede ser vendida o asignada aparte de la buena voluntad que simboliza , señaló Haight en su veredicto, que fue reflejado por la prensa estadounidense.

El magistrado detalló que Topps y Stani eran “buenas amigas cuando las dos empresas estaban en manos familiares. En 1987, Topps llegó a la Bolsa de Comercio de Estados Unidos. Y, posteriormente, Cadbury compró la firma argentina.

Topps le permitió a Stani fabricar su marca de chicle desde 1957. La creadora de Bazooka se quedaba con un 3% de las ventas del producto –especialmente atractivo para los chicos, por sus diseños e historias– que Stani realizaba en la Argentina, Bolivia, Chile, Uruguay y Paraguay.

“El uso de Stani de cualquier tecnología de Topps, después de 1996, no rompe ningún contrato entre las partes , señaló el magistrado. El argumento de Stani es que no utilizó tecnología de la firma norteamericana. En Cadbury no quisieron hacer comentarios hasta que esta sentencia sea definitiva. Por su parte, se espera que Topps presente las apelaciones correspondientes para sostener su argumento. En 2003, con la compra mundial de Adams, el portafolio de marcas de Stani se amplió.

Rivales

Arcor es el principal rival de Cadbury en el mercado argentino de chicles. La cordobesa pelea con Topline, que tiene casi un 30% del mercado.

Cadbury también participa en el negocio de las golosinas, con caramelos, chocolates en barra, confitados de chocolate y otros productos. Entre todas las líneas, es la segunda empresa de la categoría, detrás de la compañía que conduce Luis Pagani. Aunque se caracteriza por un bajísimo perfil, los competidores estiman que su facturación anual orilla los 250 millones pesos.