Las tasas de los bonos del Tesoro estadounidense siguen disparándose y esto implica un factor de volatilidad y riesgo para todos los bonos globales, incluidos los de la Argentina.
Los analistas locales consideran que existe un viento de frente sobre la deuda local a causa de la suba en las tasas de los bonos del tesoro americano.
Adicionalmente, los bonos argentinos deben lidiar también con la incertidumbre proveniente de factores locales, tales como los desequilibrios macroeconómicos como el factor electoral.
Las tasas en máximos
Todos los tramos de la curva soberana americana están mostrando fuertes avances en las últimas semanas.
El rally se viene evidenciando desde 2022, sin embargo, en las últimas semanas, dicho avance se profundizó y las tasas de los bonos del tesoro de EEUU alcanzan máximos desde 2007 y 2008.
Actualmente, la parte corta de la curva soberana de Estados Unidos se ubica en niveles de 5,4%, pasando a niveles de 4,8% en los tramos medios y largos de la curva.
Esto implica un enorme desplazamiento alcista comparado contra los valores que se evidenciaban en 2021 y 2022, cuando las tasas se ubicaban en valores de 0% en el tramo corto y de hasta 2,2% en el tramo más largo.
Debido al rally impresionante que se ha dado en las tasas, los rendimientos de los bonos del Tesoro se ubican en su valor más alto desde 2007 y 2008.
Este escenario de tasas al alza implica un factor de mayor volatilidad para todo el espectro de deuda global.
Las causas del fuerte avance en las tasas de interés a lo largo de los últimos años, y en particular, del último mes, se debe a una expectativa de suba de tasas por parte de la Fed.
La alta inflación provocó que la Fed tenga que aplicar una política monetaria históricamente agresiva. Esto hizo que los rendimientos de los bonos se desplacen al alza.
Actualmente, la Fed insiste en que las tasas van a tener que subir un poco más, e incluso remarcó que es probable que baje la tasa menos de lo esperado en 2024.
Por lo tanto, los inversores están incorporando eso a los precios, exigiéndole más tasa a los bonos, que se ubican en máximos de 16 años.
Viento de frente para los bonos
El hecho de que los rendimientos de los bonos del tesoro americano estén subiendo, lo que implica en realidad es un contexto en donde el precio de dichos bonos está cayendo, ya que las tasas se mueven de manera inversa al precio de los bonos.
Por lo tanto, lo que estamos notando es un contexto en donde el precio de los bonos esta evidenciando un ajuste de proporciones.
La dinámica de la deuda soberana americana funciona como referencia para el resto de las curvas de bonos a nivel global.
Es decir, si sube la tasa del bono americano (cae el precio de ese bono), la deuda de grado de inversión, los bonos de alto rendimiento, así como los bonos de mercados emergentes, terminan viéndose perjudicados y sufriendo fuertes pérdidas.
Cuando observamos la dinámica de los bonos globales en los últimos 3 años, encontramos que los bonos de mercados emergentes bajan 27%, seguido por la deuda de grado de inversión y por lo bonos de mercados emergentes de alto riesgo, con mermas de 25% y 22,5% respectivamente en ese mismo periodo.
El índice de bonos globales baja 21,5% en los últimos 3 años. La deuda de grado especulativo muestra pérdidas de 14%.
Yendo más al corto plazo, en el último mes, las tasas de los bonos del tesoro americano subieron con fuerza y esto golpeó a la deuda global.
Los bonos emergentes cayeron 4,3% en el último mes, mientras que la renta fija de grado de inversión, los bonos de deuda emergente de grado especulativo y el índice de bonos de alto riesgo perdieron más del 3%.
Todo esto implica un contexto de mayor volatilidad para la deuda local, es decir, un viento de frente.
Mariano Calviello, head portfolio de FIMA, explicó que la velocidad de subida de tasas por parte de la FED ha estado entre los ciclos más acelerados de suba de la historia.
Sin embargo, remarcó que ese ciclo de suba de tasas aun no se veia un traslado agresivo al resto de las valuaciones hasta esta semana.
"Definitivamente se ha iniciado ese traspaso y el mercado de renta fija internacional alcanza niveles de tasas vistos en grandes crisis. La tasa de 3 meses está en niveles similares al 2000. La tasa de 2 años en valores similares al 2007 al igual que el bono de 10 años. Esto impacta en todos los activos de riesgo", comentó.
Por lo tanto, si las tasas de los bonos del tesoro americano suben, esto implica un escenario de mayor volatilidad para la renta fija global y los bonos argentinos no pueden evitar ese escenario.
El head portfolio manager de FIMA remarca que el escenario global implica un desafío para la deuda local.
"Este viento de frente claramente afecta las cotizaciones de la deuda, generando caídas superiores al 25%, sensiblemente mayores a países comparables", comentó Calviello.
Juan Manuel Anciaume, Director de Sales & Trading de Criteria, explicó que la suba de tasas global afecta a la deuda local.
"Cuando hacemos supuestos razonables de reestructuración de la deuda argentina, tomamos las tasas de descuento en base a spreads sobre la curva americana. Los últimos cambios en la curva americana, producto de demora de la Fed en comenzar la baja de tasas, nos ha hecho incrementar la tasa de interés americana que nosotros agregamos al spread", remarcó.
En ese sentido, Anciaume detalló que esto afecta a la deuda local.
"Las tasas más altas de alguna forma perjudica el valor presente de la deuda", sostuvo.
También afecta el factor local
Los bonos argentinos además del factor global, deben lidiar con el contexto local.
Los desequilibrios macroeconómicos, la falta de reservas, la mayor inflación, junto con la incertidumbre que genera el factor electoral, todo ello provoca un escenario de estrés para la deuda en dólares.
Por lo tanto, los factores locales se combinan con el escenario de suba de tasas, generando fuertes pérdidas en los bonos, que caen entre 25% y 27% desde las PASO.
El equipo de research de Grupo IEB afirmó que ante un escenario internacional más desafiante, combinado un fuerte deterioro de la macro local que incluye el deterioro de las cuentas públicas y la aceleración nominal de la económica sumada a la incertidumbre política de cara a las elecciones, hicieron que la deuda soberana tenga una fuerte corrección.
Sobre este punto consideran que el factor global está jugando su parte para complicar a la deuda local.
"El contexto internacional se volvió más adverso, con la Fed comunicando que mantendrá las tasas elevadas por más tiempo de lo que esperaba el mercado y dando a entender que espera una suba de tasas más para este año", detallaron.
Javier Casabal, estratega de renta fija de Adcap Grupo Financiero, sostuvo que los bonos argentinos estuvieron operando a la baja en las últimas semanas, afectados por el factor global y también local.
"En el mes de septiembre, los bonos soberanos en dólares cayeron un 16%. Esto fue en sintonía con el humor del mercado global, con la tasa libre de riesgo alcanzando ya el 4,80%, un nivel que no se veía desde el año 2007. Además, los títulos locales empezaron a exhibir la fragilidad del "investment case" argentino", remarcó.
Sobre este punto, Casabal destaca que mientras Patricia Bullrich se desinfla, la mayoría de las encuestas muestran un ballotage entre Javier Milei y Sergio Massa y esto termina afectando a la deuda local.
"Para que los bonos suban, el mercado necesita mayores certezas respecto al futuro. Esto sería que Milei "se modere" y muestre capacidad de aplicar su programa, o bien que Massa muestre que realmente puede diferenciarse de la administración actual, de la que es una parte crucial. Hoy, ambas lecturas son "wishful thinking" para el mercado", advirtió.