Las bolsas mundiales se desplomaron hoy debido a la preocupación que generaron los números provenientes de China, ya que en la sesión de hoy las acciones en Shangai llegaron a perder un 9%, luego de cerrar la semana pasada con una pérdida del 11% en cinco días.
El desplome fue generalizado: la bolsa de Londres perdió 4,67%, Fráncfort 4,70%, y la de París registró una baja del 5,35%.
En Madrid, el IBEX 35 se depreció un 5,01% y, en Milán, el índice FTSE Mib cayó en un 5,96%.
En Wall Street, el Dow Jones cerró con una contracción de 3,58 %, el S&P 500 un 3,94% y Nasdaq perdió 3,82%.
El Bovespa, índice preferencial de la bolsa de San Pablo, promedió la jornada con una caída del 3,03%.
Las materias primas no se quedaron atrás: el petróleo cayó por debajo de los 40 dólares, su nivel más bajo en seis años.
Shanghai lideró el desplome general de las bolsas, con una caída del 8,49%, después de haber llegado a perder el 9% durante la sesión. La semana pasada se había desplomado más del 11%.
En Tokio, el índice Nikkei cerró la jornada con una pérdida del 4,61%, y registró su nivel más bajo en seis meses, tras cinco sesiones consecutivas en rojo.
El contagio llegó hasta la Bolsa de Taiwán, que cerró con una caída del 4,84% tras llegar a ceder un 7,46%, y Hong Kong que perdió más del 5%.
En la estela de las asiáticas, la Bolsa de Sidney descendió un 4,09% y cayó a su nivel más bajo en dos años, y Seúl perdió un 2,47%.
Los indicadores decepcionantes se suceden y crece la desconfianza general: el índice PMI sobre la actividad industrial de referencia en la segunda economía mundial, publicado el viernes, señala una drástica contracción de la actividad manufacturera en agosto.
Otro dato que miran atentamente los inversores es el valor de la moneda del gigante asiático. La sorpresiva devaluación del yuan el 11 de agosto -percibida como un intento desesperado de las autoridades chinas para impulsar sus exportaciones y su actividad económica- no hizo más que aumentar la inquietud general, causando una oleada de impactos en los mercados.
Desde entonces, se han esfumado al menos el equivalente a 5000 millones de dólares en valor de las Bolsas mundiales.
FUENTE: Agencias Internacionales