Israel moviliza 300.000 reservistas mientras Hamás amenaza con matar rehenes

Israel impuso un "sitio total" sobre la Franja de Gaza, movilizó la cifra récord de 300.000 reservistas y bombardeó por aire el enclave controlado por Hamás, mientras el grupo palestino amenazaba la vida de decenas de rehenes. El ejército israelí dijo que había pasado a la ofensiva tras recuperar el control del territorio infiltrado por Hamás durante el ataque del fin de semana, el más mortal dentro de Israel desde 1948. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que la campaña "recién ha empezado", al tiempo que prometió una experiencia "difícil y terrible" para Hamás y prometió "cambiar el Medio Oriente". Pero Hamás dijo el lunes por la noche que ejecutaría a un cautivo por cada nuevo ataque aéreo que alcanzara a civiles palestinos y se produjera sin previo aviso. El grupo ha secuestrado al menos a 100 personas, entre ellas mujeres, niños, soldados israelíes y ciudadanos extranjeros. "Anunciamos que [por] cada ataque, sin previo aviso, contra nuestra gente que esté a salvo en sus casas, lamentablemente nos veremos obligados a ejecutar a uno de los rehenes civiles del enemigo", dijo el grupo en una grabación enviada a Al Jazeera. Más de 1500 personas han muerto desde el sábado, entre ellas más de 900 civiles y tropas israelíes, y 687 fallecidos en Gaza, según medios israelíes y un vocero del Ministerio de Salud palestino. "Desde el Holocausto no habían muerto tantos judíos en un solo día", dijo Isaac Herzog, presidente de Israel. "Y desde el Holocausto no habíamos asistido a escenas de mujeres y niños judíos, abuelos -incluso sobrevivientes del Holocausto- amontonados en camiones y llevados en cautiverio". Mientras estallaban los combates el lunes, Yoav Gallant, ministro de Defensa israelí, declaró que había ordenado el "sitio total" de Gaza. Y añadió: "No habrá electricidad, alimentos ni combustible [suministrados a Gaza]. Estamos luchando contra [terroristas] bárbaros y responderemos en consecuencia". El gobierno israelí informó que había ordenado cortar el suministro de agua a Gaza, una franja de tierra densamente poblada y rodeada por un muro, en la que viven 2,3 millones de personas. Mientras crecían las expectativas de que Israel lanzara su primera ofensiva terrestre contra Gaza en casi una década, el vocero de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Daniel Hagari, declaró que la movilización de 300.000 reservistas era la mayor en la historia del país. "Nunca habíamos reclutado a tantos reservistas a tal escala", añadió. "Estamos pasando a la ofensiva". Netanyahu publicó un video de torres de edificios derrumbándose en Gaza después de que jets, helicópteros, aviones y artillería israelíes atacaran cientos de lo que el ejército dijo que eran "objetivos terroristas". Las FDI afirmaron que habían recuperado el "control total" de las comunidades cercanas al enclave que fue infiltrado por los militantes durante el fin de semana. Añadió que sus helicópteros también estaban "atacando en territorio libanés", al norte de Israel, poco después de afirmar que había matado a "varios militantes" que habían cruzado al país. En un comunicado en el que confirma la muerte de tres de sus combatientes, Hezbollah, el grupo respaldado por Irán, afirmó haber disparado misiles y morteros contra dos puestos militares israelíes al otro lado de la frontera, en Galilea. La violencia en la frontera entre El Líbano e Israel se produce en medio del temor a un conflicto más amplio en múltiples frentes. En un intento de evitar la escalada del conflicto, Qatar ha mantenido conversaciones con Israel y Hamás para llegar a un acuerdo en el que el grupo acepte liberar a las mujeres y niños que mantiene como rehenes, según declaró una persona informada de las conversaciones. La persona añadió que, a cambio, el Estado judío podría liberar a mujeres y niños palestinos retenidos en sus prisiones y que las conversaciones contaban con el apoyo de Estados Unidos. Pero no hubo señales inmediatas de que tales contactos estuvieran dando resultado. El Departamento de Estado estadounidense informó que 11 estadounidenses habían muerto desde el sábado y añadió que había más desaparecidos. Francia dijo que dos de sus ciudadanos habían muerto. [NdeE: al cierre de esta edición también se informó de siete argentinos muertos por el ataque]. En respuesta al ataque de Hamás, la Unión Europea anunció la revisión de toda su financiación para el desarrollo de Palestina, que implica a 691 millones de euros en ayuda. Los grupos humanitarios afirmaron que Gaza enfrenta a un futuro desolador. "La escala sin precedentes de las hostilidades amenaza con una emergencia humanitaria de una magnitud inimaginable, incluso para una región demasiado familiarizada con los desastres", dijo Nadim Zaghloul, director para Palestina de ActionAid, un grupo humanitario. Y añadió: "Con el anuncio de un 'bloqueo total'... en Gaza, más de 2 millones de personas se verán sumidas aún más en la crisis y completamente privadas de alimentos, electricidad y combustible". El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió el lunes a "todas las partes" que permitieran el acceso de "ayuda humanitaria urgente" a los civiles palestinos atrapados en Gaza, y añadió que había recibido informes de que misiles israelíes habían alcanzado instalaciones sanitarias en el territorio. Mientras se propagaban las repercusiones del conflicto, Chevron informó que el Ministerio de Energía israelí le había ordenado detener la producción en su yacimiento de gas de Tamar, en el Mediterráneo, pero que seguiría abasteciendo a sus clientes en Israel. Los futuros del gas en Europa subieron un 16%, mientras que los precios del petróleo subieron un 4%, justo por debajo de los u$s 88 el barril, ante el temor de que las consecuencias del conflicto se extiendan a toda la región. Varias compañías aéreas internacionales, entre ellas Cathay Pacific, easyJet y Lufthansa, han suspendido sus vuelos a Israel tras el estallido del conflicto.

Israel moviliza 300.000 reservistas mientras Hamás amenaza con matar rehenes

Más de 1500 personas han muerto desde el sábado, entre ellas más de 900 civiles y tropas israelíes, y 687 fallecidos en Gaza, según medios israelíes y un vocero del Ministerio de Salud palestino.

John Reed, James Shotter y Hudson Lockett

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