EE.UU. amenazó a Rusia con comenzar a desarrollar nuevos misiles nucleares a menos que Moscú vuelva a cumplir con un tratado de control de armas que ha sido acusado de violar.

Funcionarios estadounidenses dicen que Donald Trump quiere permanecer en el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés) pero que no aceptará que Rusia siga incumpliendo el acuerdo de 1987.

Washington acusó al Kremlin de violar el tratado INF, que prohibe la posesión, la producción y las pruebas de vuelo de misiles de crucero con armas nucleares y misiles balísticos nucleares terrestres con un alcance de 500 km a 5,500 km. El general Paul Selva, vicepresidente de los jefes de Estado Mayor Conjunto de EE.UU., anunció en marzo al Congreso que Rusia había desplegado un nuevo misil de crucero que contravenía el INF.

En ese momento, el equipo de seguridad nacional de Trump había decidido que EE.UU. no tomaría medidas que infringirían el INF, dijo un funcionario.

Además de investigar modificaciones a armas existentes y desarrollar nuevos sistemas, EE.UU. impondría restricciones a las empresas rusas que producen el misil Novator 9M729. Pero destacaron que Trump quería salvar el tratado, y revertiría las medidas tan pronto como Rusia volviera a cumplir con el acuerdo.

"La posibilidad de que el tratado se desmorone es inherente a este enfoque", dijo un funcionario. "No tenemos intenciones de permanecer obligados por el acuerdo, si ellos se rehusan a estar obligados. Pero nuestra sincera esperanza es que ambas partes terminen cumpliendo con el tratado".

Esta semana, EE.UU. y Rusia convocarán una reunión de la "comisión especial de verificación" que se creó para garantizar el cumplimiento del INF. Uno de los funcionarios estadounidenses dijo que Washington había decidido aumentar la presión política sobre Rusia porque no había respondido a "remedios de vergüenza".

Rusia se ha mantenido firme en sus negaciones con respecto a su violación del tratado. Sergei Ryabkov, viceministro de relaciones exteriores de Rusia, dijo que las afirmaciones de EE.UU. "eran totalmente infundadas". El ministerio de asuntos exteriores de Rusia dijo que Moscú estaba "listo para entablar un diálogo profesional no politizado" pero que los intentos de imponer "ultimátums o presiones militares y políticas a Rusia a través de sanciones no son aceptables".

Moscú, por su parte, acusó a Washington de violar el tratado ya que los sistemas de defensa con misiles de EE.UU. en Rumania - que están programados para desplegarse en Polonia el año próximo - podrían ser utilizados para lanzar misiles Tomahawk de alcance medio. Konstantin Kosachyov, jefe del comité de asuntos exteriores del Consejo de la Federación, la cámara alta del parlamento ruso, dijo que el sistema Aegis Ashore representaba una "flagrante violación del tratado INF".