El castillo andaluz más antiguo de España tiene más de 1000 años, se conserva intacto y puede visitarse por menos de 5 euros

En la provincia de Jaén, sobre una colina que vigila el pueblo de Baños de la Encina, se alza imponente el Castillo de Burgalimar, también conocido como Bury Al-Hamma. Construido en el año 968 por el califa Alhakén II, esta fortaleza es el castillo más antiguo de España y uno de los mejor conservados de Europa. Su estructura original ha sobrevivido más de mil años, manteniéndose prácticamente intacta a pesar de su antigüedad y el paso de los siglos.

Una obra de arquitectura milenaria

Lo que hace especial a esta fortaleza no solo es su longevidad, sino el hecho de que ha sido testigo de importantes eventos históricos. Desde sus 14 torres, que formaban parte de un sistema defensivo clave durante la época musulmana, se puede contemplar el valle del Guadalquivir y los olivos que rodean la región. 

A lo largo de su historia, el castillo ha sido escenario de numerosas batallas, pasando a manos cristianas en 1225 bajo el reinado de Fernando III, quien cedió el control a la Orden de Santiago.

Un recorrido histórico por menos de 5 euros

Hoy en día, el Castillo de Burgalimar es un Monumento Nacional desde 1931 y puede ser visitado por tan solo 4,50 euros. Las visitas guiadas, que duran unos 45 minutos, permiten explorar su patio de armas, la torre del homenaje y otras áreas históricas que aún conservan los restos de civilizaciones anteriores, desde la Edad del Bronce hasta la ocupación romana. 

Este recorrido es una oportunidad única para sumergirse en la historia de Andalucía a través de una fortaleza que ha permanecido firme por más de un milenio.

Un castillo vivo lleno de actividades culturales

Durante la primavera y el verano, el castillo no solo ofrece visitas turísticas, sino también eventos culturales como conciertos de música andalusí, veladas flamencas y rutas teatralizadas, que recrean momentos históricos en el mismo lugar donde ocurrieron. Estas actividades lo convierten en un punto de encuentro para amantes de la historia y la cultura, añadiendo un atractivo especial a la experiencia.

Una joya accesible y de fácil visita

Llegar al castillo es sencillo, con un aparcamiento gratuito cercano y una oficina de turismo que organiza visitas diarias. Este acceso fácil, combinado con el bajo costo de la entrada, convierte al Castillo de Burgalimar en un destino ideal para quienes buscan una inmersión cultural asequible y rica en historia.