El Gobierno de Pedro Sánchez, en la cornisa: el PSOE exige adelantar las elecciones
El presidente, tras pedir perdón, enfrenta presiones internas y externas para adelantar las elecciones, mientras la oposición y socios como Junts y Sumar exigen claridad.
Un reciente informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha desatado una crisis sin precedentes en el PSOE, al revelar indicios de una red que habría operado durante una década con comisiones ilegales a cambio de contratos públicos.
La investigación, que involucra a figuras clave como Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García, ha llevado a la dimisión de Cerdán como secretario de Organización y ha puesto en entredicho la continuidad del Ejecutivo de Pedro Sánchez.
El jueves, en una comparecencia en la sede socialista de Ferraz, Pedro Sánchez pidió perdón a la ciudadanía, anunció una auditoría externa de las cuentas del partido y descartó un adelanto electoral, insistiendo en completar la legislatura hasta 2027. Sin embargo, la presión interna y externa crece, con sectores del PSOE y socios parlamentarios exigiendo medidas más contundentes.
El informe de la UCO, de 490 páginas, detalla una presunta trama que comenzó en Navarra en 2015 y se expandió a nivel nacional tras la llegada de Sánchez a La Moncloa en 2018. Las grabaciones intervenidas, en las que Cerdán, Ábalos y García discuten el reparto de hasta 620.000 euros en comisiones, han generado indignación en el partido y en la opinión pública.
La oposición, liderada por el PP, reclama elecciones inmediatas, mientras que aliados como Junts y Sumar cuestionan la viabilidad de la legislatura. En el PSOE, voces como la de Emiliano García-Page y Felipe González abogan por adelantar los comicios para minimizar el daño electoral, especialmente de cara a las municipales y autonómicas de 2027.
¿Qué revela el informe de la UCO sobre la trama corrupta?
La investigación de la UCO señala a Santos Cerdán como el presunto gestor de una red de comisiones ilegales vinculada a adjudicaciones de obra pública por más de 700 millones de euros.
Según el informe, la trama arrancó en Navarra en 2015, cuando Cerdán y Koldo García, su exescolta, comenzaron a captar pagos de empresas como Acciona. Con la llegada de Ábalos al Ministerio de Transportes en 2018, el sistema se sofisticó, favoreciendo a constructoras a cambio de sobornos.
Las grabaciones, incautadas a García, muestran conversaciones explícitas sobre el reparto de dinero, como cuando Ábalos insta a García a coordinarse con Cerdán: "Habla con Santos, ¿eh?".
El informe también sugiere una posible financiación irregular del PSOE, con referencias a un "impuesto" exigido a altos cargos del Ministerio de Transportes.
Este punto ha alarmado a los socios del Gobierno, como Sumar, que exige una auditoría exhaustiva, y a Podemos, que propone una comisión de investigación en el Congreso.
La Audiencia Nacional, que instruye el caso, ha ordenado nuevas diligencias y no descarta más imputaciones. Las pruebas, que incluyen discos duros encriptados y registros bancarios, podrían destapar una década de operaciones ilícitas, según fuentes judiciales.
¿Por qué crece la presión para un adelanto electoral?
Dentro del PSOE, la inquietud se intensifica ante el impacto del escándalo en la imagen del partido. Alcaldes y líderes territoriales, como el de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, piden un Congreso Extraordinario y elecciones generales antes de 2027 para evitar un "arrastre negativo" en los comicios locales.
Emiliano García-Page, respaldado por Felipe González, defiende esta postura, argumentando que un superdomingo electoral sería devastador para el poder territorial socialista. Un peso pesado del PSOE andaluz, según el diario El País, admite que un adelanto sería "suicida", pero necesario para proteger a los cargos locales.
La oposición, con el PP a la cabeza, ve en la crisis una oportunidad para forzar la caída del Gobierno. Elías Bendodo ha instado a Yolanda Díaz a romper con Sánchez, mientras Alberto Núñez Feijóo amenaza con una moción de censura si los socios del PSOE cambian de posición.
Junts, clave en la investidura de Sánchez, ha solicitado una reunión urgente para evaluar la legislatura y no descarta retirar su apoyo, aunque prioriza los intereses de Cataluña.
La sensación de "deflagración lenta" en el PSOE, como describe un miembro de la cúpula, alimenta las especulaciones sobre un posible adelanto electoral en otoño.
¿Cómo responde el PSOE a la crisis interna?
El PSOE intenta contener el daño con medidas de urgencia. Sánchez ha anunciado una reestructuración de la Ejecutiva Federal para el 5 de julio y una auditoría externa para despejar dudas sobre financiación ilegal. Sin embargo, estas propuestas no calman las tensiones internas.
La decisión de Cerdán de no entregar aún su acta de diputado ha generado malestar, interpretada como un desafío a la autoridad de Sánchez. En Aragón, el partido ha suspendido de militancia a dos cargos mencionados en los audios de la UCO, mostrando una postura de "tolerancia cero" ante la corrupción, según Diana Morant.
A pesar de la indignación interna, el PSOE defiende que el Gobierno no está implicado en la "corruptela", como sostiene IU, y apuesta por el diálogo con sus socios para sostener la legislatura. No obstante, la percepción de un partido "en estado catatónico", según un dirigente, y la falta de una respuesta más contundente alimentan el descontento.