

La polémica se desató en el Congreso tras conocerse que Noelia Núñez, diputada del PP por Madrid y presidenta de la formación en Fuenlabrada, infló su trayectoria académica. El PSOEreclamó su dimisión inmediata al considerar que la dirigente popular incurrió en una "falsedad consciente y reiterada" sobre sus estudios universitarios.
Según los socialistas, Núñez aseguró en diversas entrevistas ser licenciada en Derecho, Filología Inglesa y Ciencias Jurídicas de la Administración Pública. Sin embargo, la propia diputada admitió horas antes en redes sociales que no ha concluido esas carreras y que la información errónea figura por "equivocación" en su ficha oficial del Congreso.
El caso escaló rápidamente después de que el ministro de Transportes, Óscar Puente, cuestionara públicamente la veracidad de su currículum.
¿Por qué el PSOE pide su salida de inmediato?
La dirección socialista sostiene que esta situación no puede considerarse un simple error. Argumentan que Núñez engañó de forma reiterada sobre su formación, lo que "desprestigia a las instituciones y envía un mensaje inaceptable a la ciudadanía".

Además, recordaron que los estatutos internos del Partido Popular contemplan sanciones o expulsión por falsificación de datos académicos.
El alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala, subrayó que, si Núñez no renuncia, Isabel Díaz Ayuso deberá explicar por qué la mantiene en el cargo, ya que es la presidenta del PP madrileño.
El PSOE insistió en que no se trata de un asunto menor, sino de una vulneración ética que requiere medidas inmediatas para preservar la credibilidad política.
¿Qué consecuencias puede tener para el PP y para Núñez?
El caso supone un nuevo foco de tensión para el Partido Popular, que enfrenta la presión de dar explicaciones públicas sobre la continuidad de Núñez.

Como vicesecretaria de Movilización y Reto Digital del PP nacional, su figura tiene peso dentro de la estructura partidaria. Cualquier decisión en torno a su futuro político impactará en la imagen de transparencia que el PP intenta proyectar.
Núñez, por su parte, defendió que no hubo mala fe y que la confusión en su ficha del Congreso responde a un error administrativo. Sin embargo, las críticas no cesan y crece la incertidumbre sobre si asumirá responsabilidades políticas o esperará la posición oficial de su partido.












